Durante las fiestas de fin de año como navidad y año nuevo, la comida en abundancia y las copas demás, suelen ser parte de la celebración. Después de su paso, es muy probable que la mayoría de las personas experimenten la sensación de estar más pesados, cansados, hinchados, tener retención de líquidos, malestar gástrico e incluso con problemas para dormir.
“Todo esto, se debe a que al consumir alimentos con alto contenido de sodio, grasas, harinas refinadas y alcohol, entre otros, el cuerpo acumula toxinas radicales libres y líquido, provocando en gran parte de estas molestias”, explica Catalina Silva, Nutrióloga de la Clínica Terré y Directora del Programa Equilibrio Vital.
“Además, al consumir más alimentos de lo que se ingiere habitualmente, el sistema digestivo se sobrecarga, generando desde las molestias”, agregó.
Es por ello que tras estos días de “licencia alimenticia” debemos limpiar y desintoxicar el cuerpo, esto no sólo para sentirnos mejor, sino que también para bajar algunos de los kilos que ganamos en época. “Lo importante es tener claro que NO es recomendable hacer una dieta extrema, ya que el cuerpo también lo tomará como una agresión. Así como no es bueno sobrecargar el cuerpo de comida y bebidas alcohólicas durante 3 ó 4 días, también es malo someterlo y privarlo del mismo modo”, explicó la profesional.
Otros consejos que pueden ayudar a desintoxicar el cuerpo post fiestas y que se puede realizar al menos por 3 a 7 días son:
- Iniciar el desayuno con un batido realizado con frutas. Preferir piña o kiwi por su alto contenido de fibra y efecto desintoxicante, o arándanos/frambuesas/frutillas, ya que aportan pocas calorías y tienen buen efecto antioxidante, más verduras verdes, tales como apio, espinaca, acelga, pepino, agua y jugo de limón. Además, se le puede agregar menta para que quede más refrescante o jengibre por su efecto anti-inflamatorio.
- A media mañana, lo ideal es tomar una limonada natural, por ejemplo de limón, menta y jengibre, o incluso hacer una en casa, con limón, 3 a 4 frutillas y menta, obviamente sin agregar azúcar. Si no es posible hacer esto, entonces se puede reemplazar por un lácteo descremado.
- Al almuerzo, en los primeros días, se deben evitar las carnes rojas, ya que su proceso de digestión es mucho más lento. Lo ideal es consumir pollo, pavo o pescados blancos con abundantes ensaladas verdes.
- A media tarde un milkshake: Se prepara con 1 vaso de leche cultivada light y 6 frutillas o ¾ de taza de arándanos, moras y/o frambuesas (se pone la leche, fruta y hielo en la batidora y queda listo para tomar).
- En la noche se debe repetir el almuerzo, pero en menor cantidad, o si se quiere comer más liviano, una sopa de verduras hecha en casa, con pollo o pavo como plato principal es una muy buena opción.
- Si se siente hambre entre comidas, se puede comer jaleas light.
- Tomar aguas saborizadas hechas en casa, por ejemplo: En la noche un jarro de agua en el refrigerador con rodajas de pepino, limón y menta, y al día siguiente estará lista para ser consumida.
- El ajo también tiene un muy buen efecto antinflamatorio y ayuda mucho con algunos síntomas asociados al colon. Una forma de consumirlo para no quedar con olor a ajo, es tener dientes de ajo pelados y en ayuno tomar un diente de ajo con un vaso de agua, aunque puede parecer más extraño, ayuda bastante con los síntomas digestivos.
- Lo ideal es de a poco ir retomando la alimentación normal, pero al menos por 3 a 7 días ayudar con la alimentación y la actividad física a que tu cuerpo se recupere de manera más rápida. Además, al seguir estos consejos te sentirás más liviano y con más energía para enfrentar este nuevo año.
Fuente: BioBioChile