10 malos hábitos afectan tu relación de pareja

Cuando llevamos un tiempo saliendo con nuestra pareja es fácil que aparezcan una serie de hábitos muy perjudiciales para la relación sin que nos demos cuenta. La mayoría los realizamos de forma inconsciente, llegando a justificarlos cuando se hacen evidentes. Sin olvidar que cada pareja tiene sus propias características únicas, os traemos los 10 hábitos negativos más habituales en las relaciones amorosas.

1- Hablar solo del trabajo/estudios: Los primeros meses todo es nuevo, pero cuando conocemos la mayoría de cosas de nuestra pareja nos estancamos en preguntar mecánicamente lo típico relacionado con las ocupaciones diarias. Si dejamos que nuestras conversaciones se reduzcan al trabajo o a los estudios llegará un momento en el que no sepamos de qué hablar cuando se acaben esos temas.

2- Olvidar fechas puntuales: Su cumpleaños no se nos olvida nunca (¡o no debería!), pero sí es fácil que se nos olviden fechas no tan importantes a priori como puede ser el cumpleaños de un familiar suyo o el día que estrenan una película que tenía muchas ganas de ver con nosotros. Muestran falta de interés y dejadez, desgastando la relación hasta llegar al punto de no compartir cosas juntos.

3- Dejar de ver a los amigos: Esta no tiene tanto que ver con nuestra pareja como el hecho de que nos afectará en lo personal, repercutiendo inevitablemente en nuestra relación.

Perder a las amistades de siempre es uno de los peores errores que podemos cometer. No cuesta nada crear el hábito saludable de contactar con ellos cada cierto tiempo.

4- Se acabaron los halagos espontáneos: Decir lo guapa que está hoy, alabar la ropa de nuestro chico o darnos cuenta de que se ha cambiado el peinado son detalles pequeños pero fundamentales para mantener la chispa en la relación.

No hay nada peor que hacerle entender que ya no nos interesa su aspecto físico, perdiendo la ilusión porque se cuiden para nosotros sin que se lo pidamos.

5- Sin planes en toda la semana: Todos sabemos que la rutina es uno de los hábitos más difíciles de superar, y es en gran parte porque también es de los más complicados de reconocer.

Si hacemos que nuestra vida en pareja se reduzca a vernos siempre a las mismas horas y hacer siempre las mismas actividades solo conseguiremos que pase el tiempo mientras se erosiona el interés mutuo en estar juntos.

6- Hacer regalos estándar: Los primeros meses nos rompíamos la cabeza para hacerle un regalo y ahora simplemente vamos a la tienda y compramos el último disco que haya salido; error, y de los más duros de cambiar.

Tenemos que quitarnos rápidamente el hábito de automatizar los regalos porque a los pocos seguidos que hayamos hecho saltarán las alarmas de que lo nuestro ya no tiene la misma magia de antes.

7- Descuidar nuestro aspecto: Otro hábito del que no nos damos cuenta porque ya no lo vemos necesario. Cuando estamos solteros solemos cuidar al máximo todo lo que tiene que ver con nuestra imagen, perdiendo el interés al haber conseguido ya nuestro objetivo de encontrar pareja. No es necesario que sigamos machacándonos diariamente para parecer perfectos, con demostrarle que seguimos intentando atraerle es suficiente.

8- Estar cansados siempre para hacer cosas nuevas: Nos adaptamos rápidamente a la rutina, haciendo que todo lo que sea salir de ella se nos antoje incómodo. Sin tener que estar innovando continuamente con que nos mostremos predispuestos a movernos es más que suficiente.

9- Poner por delante a otras personas: Hemos acordado que no nos apetece ir a ese sitio que tantas ganas tiene nuestra pareja, pero misteriosamente nuestros amigos nos invitan a probar otro distinto y vamos raudos. Un hábito que desgasta la forma de vernos, poniendo en grave peligro la continuidad de la relación.

10- Hablar cada vez menos: El último hábito de la lista es a la vez de los más sutiles y difíciles de cambiar porque hay gente que no es capaz de reconocerlo como una problemática.

Hablar menos no significa que la confianza haga que sepas lo que piensa tu pareja y cuando se pierde la comunicación esta puede ser reemplazada por desconfianza, malos entendidos y malos acuerdos, y da lugar a que el vacio que se produce en la comunicación sea llenado por alguien más.

Te podría interesar

Deja tu comentario