El doctor José Antonio Rodríguez Quezada, ginecólogo y obstetra, nos revela algunos de los mitos y realidades más comunes sobre este órgano
La placenta es un órgano encargado de la nutrición del bebé durante el embarazo. Dentro de ella existen vasos arteriales y venosos que permiten el intercambio y depuración del metabolismo, y satisfacen las necesidades de respiración, nutrición y excreción del feto durante su desarrollo. Recientemente se han popularizado los supuestos beneficios y aplicaciones de la placenta para la belleza y salud de las mujeres por medio de cremas, shampoos, cosméticos o suplementos alimenticios, etc.
- ¿Con los eclipses la placenta se daña? Falso. Durante décadas se ha pensado que los eventos naturales como eclipses, estrellas fugaces, fenómenos meteorológicos o cambios climáticos pueden tener efectos adversos en la vida intrauterina del feto, pero se ha demostrado con bases científicas que no provocan ninguna consecuencia en bebé.
- ¿La placenta se puede hacer shampoo? El propósito fundamental del shampoo es limpiar el cabello mediante una acción que elimine la grasa, sudor, mal olor, polvo o partículas contaminantes acumuladas durante el día. Pero esa acción debe ser selectiva, de manera que también preserve la grasa natural responsable de dar brillo y lubricación, tanto al cabello como al cuero cabelludo. Existen diferentes formulaciones y combinaciones para usar la placenta en estos productos, pero no existen estudios científicos que demuestren su utilidad.
- ¿La placenta se come? Falso. Su función es específica durante el periodo del embarazo; no obstante, la placenta de algunos animales se ha comercializado en capsulas, geles, shampoo y cremas sin ninguna utilidad científicamente probada.
- ¿Puede desprenderse la placenta? Verdadero. Existen situaciones clínicas como el desprendimiento de placenta “normo-inserta”, en donde se presenta un sangrado color “vinoso” y se interrumpe el flujo placentario al bebe, provocando efectos fatales, ésta es una de las urgencia obstétricas más comunes que pone en peligro el binomio feto-madre.
- ¿La posición de la placenta puede impedir un parto normal? Verdadero. Durante el trabajo de parto el orificio cervical interno (cérvix) se dilata, si la placenta se encuentra en una posición anómala, puede llegar a obstruirlo e incluso desprenderse, ocasionando un sangrado abundante y colocando a la paciente en una emergencia obstétrica.
