Si de pronto encuentras esos crecimientos carnosos en la piel que te tientan a sacarlos con la ayuda de tus uñas, no lo hagas. Son las tan temidas verrugas, que si bien son inofensivas, no son nada estéticas y en cuanto las descubrimos, buscamos la manera de eliminarlas.
Suelen aparecer en lugares de fricción de la piel como debajo de las axilas, el cuello o las ingles.
Tal vez quieras culpar a tus padres por estas verrugas, que tienden a ser genéticas, pero lo cierto es que también aparecen con mayor frecuencia en personas obesas que son las que tienen mayor superficie de piel frotando con la piel.
Podemos encontrar las verrugas agrupadas en “racimos” o verlas brota de manera aislada.
Si este es tu caso, debes saber que no eres el único, ya que muchas personas sufren de verrugas en la piel, sobre todo después de los 50 años y aunque son inofensivas, pueden sangrar si las rascamos o raspamos por accidente, algo que resulta muy doloroso.
Durante años se utilizó como remedio casero, atar un hilo o un cabello a la verruga para que se seque y caiga sola, pero los dermatólogos coinciden en que esto aumenta los riesgos de infección o que la verruga no cicatrice de manera adecuada.
Los mejor es consultar con el médico, que establecerá cuál es el mejor tratamiento para eliminar las verrugas según el lugar en el que estén situadas y de acuerdo al tipo de piel de cada persona.
Por lo general se hace en el mismo consultorio del dermatólogo y se utilizan métodos como anestésicos locales y un corte rápido o la congelación y la cauterización, que son las opciones más comunes.
No suelen generar dificultades y las molestias son mínimas. Tampoco es probable que queden marcas, ni que vuelvan a crecer en el mismo lugar.
Si tus verrugas están ubicadas en lugares que no te generan incomodidad, tal vez la mejor opción es dejarlas así; pero como toda reacción en la pile, en cuando notes cambios significativos, debes consultar con un especialista.
Si sus etiquetas de la piel no te molestan, es totalmente bien para olvidarse de ellos. Pero como con cualquier tipo de tumores de la piel, si hay un cambio notable en la aparición o el crecimiento, debería tener que miró por su dermatólogo.