A menudo se asocia al sexo con diferentes aspectos cotidianos que también influyen en su rendimiento. El estrés, amigo del cansancio diario, se presenta en la cama para romper un momento de encuentro, que debería regalar placer y solo otorga un mal clima.
Aquí también entra la alimentación, clave para mejorar el desempeño sexual de una pareja.
"Tanto en el hombre como en la mujer, obviamente el equilibrio de todas las funciones vitales: alimentación, horas de sueño, nivel de estrés, actividad recreativa, sobrepeso edad. Todo esto tiene que ver en cómo funciona o puede continuar funcionando una sexualidad buena o cómo se puede mejorar una sexualidad no suficiente o no intensa", explicó el médico especialista en nutrición Máximo Ravenna a Infobae.
A su vez, el especialista afirmó que "una alimentación equilibrada, con todos los componentes que uno ya conoce, sino entramos en el peligro de buscar tal alimento que supuestamente me va a generar un efecto de aumento en mi genitalidad o sexualidad no es bueno. Yo dudo que un alimento en sí mismo por las dosis que puede haber en su composición pueda tener ese efecto".
El sexo y la comida pueden ir de la mano, aunque también volverse enemigos constantes (iStock)
"Sí estoy seguro que una persona que puede ser muy sexuada no va a tener la misma sexualidad activa si está muy gordo, mal dormido o mal alimentado voluptuosamente", sostuvo el médico.
Una persona que está con sobrepeso, evidentemente, no va a tener entrenamiento, sí una mala respiración, se va a agitar, eso va a impedir que haya una buena circulación en la zona sanguínea de las partes genitales, disminuyendo su capacidad y sexualidad.