Aunque sus ingredientes naturales no tienen contraindicaciones, procuraremos hacer una prueba antes de aplicarlo en todo el rostro para asegurarnos de que no presentamos reacciones alérgicas
Los productos rejuvenecedores para la piel se han convertido en los mejores aliados de la belleza femenina, en especial a partir de los 30 años.
La industria cosmética ha desarrollado una amplia variedad de tratamientos con los que se pueden combatir los signos tempranos de la edad y todos esos daños que se producen por la acción de los radicales libres.
No obstante, está comprobado que hay algunos ingredientes de origen natural que también pueden usarse con este fin y sin necesidad de exponer la piel a químicos.
Entre esto nos encontramos con un novedoso producto que, debido a su poder hidratante y reparador, se está haciendo popular como una buena alternativa para mantener la piel firme y joven.
Se trata de un sérum natural a base de aceites esenciales que, gracias a su alto aporte de nutrientes, puede renovar la piel.
A continuación queremos contarte cuál es su función y cómo se preparar en casa con unos simples pasos.
Un sérum facial es un producto cosmético con una alta concentración de activos que le proporcionan humedad natural a la piel y otras sustancias esenciales para su rejuvenecimiento.
Este tiene una textura más ligera que las cremas hidratantes, es más suave que un gel y se absorbe con facilidad sin dejar sensación grasosa.
A diferencia de otros tratamientos para conservar la piel, el sérum actúa hasta en las capas más profundas de la piel para dar mejores resultados.
Pese a esto, puede usarse en conjunto con cremas faciales, lociones y otros cosméticos que minimizan la presencia de arrugas.
Al incluirlo dentro de la rutina de belleza se obtienen beneficios como:
Aunque en el mercado existen varios tipos de sérum que dan excelentes resultados, en este caso proponemos uno completamente natural y lleno de beneficios.
En este vamos a combinar aceites esenciales suaves con la piel y cuya textura oleosa no altera la función de las glándulas sebáceas.
Está aconsejado para las pieles más secas porque ayuda a retener la humedad y evita la descamación y sensibilidad.
Al momento de adquirir los aceites esenciales para preparar este producto natural debes tener cuidado para no confundirlo con las esencias sintéticas.
Aunque en aromas son parecidos, solo los aceites tienen propiedades benéficas para la piel.
En caso de con conseguir el aceite esencial esencial de ylang-ylang, lo puedes remplazar por otro con propiedades similares como el de manzanilla.
Los ingredientes utilizados no suelen ocasionar reacciones negativas porque son aptos para todo tipo de cutis; sin embargo, como existen condiciones especiales de la piel, lo idóneo es hacer una pequeña prueba con el producto antes de aplicarlo en su totalidad.
En caso de notar alguna reacción alérgica o enrojecimiento, suspende su uso de inmediato.