Aunque tengamos preferencia por un corte, debemos tener en cuenta nuestras facciones y la forma de nuestro rostro para asegurarnos de que la visita a la peluquería sea un éxi
El corte de cabello es uno de los cambios que le podemos hacer a nuestra imagen para reflejar un estilo diferente, fresco y renovado.
No obstante, una de las cosas que pocas tienen en cuenta es que la forma del rostro es una de las claves para que el nuevo look quede espectacular.
Si bien algunos estilistas saben hacer muy bien su trabajo, en ocasiones hacemos malas elecciones y, por más que el corte quede bien, no logramos sentirnos satisfechas.
Por suerte para todas, existen algunos trucos sencillos para distinguir cuál es el que más nos favorece según las facciones que caracterizan nuestra cara.
En términos profesionales se conoce como visagismo y es una técnica desarrollada por el francés Claude Juillard para analizar de forma detallada las formas y líneas del rostro con el fin de adaptar mejor el estilo de cada persona.
Los rostros redondos se caracterizan por tener un mentón pequeño y un contorno y mejillas redondeadas.
Debido a esto, a través del corte se buscará un efecto de longitud para que luzca más delgado y largo.
Para conseguirlo se le puede dar volumen en la parte superior, acortando los laterales o eligiendo un flequillo barrido hacia un lado.
No se debe cortar a la altura de la mandíbula porque este lo hará lucir más redondo.
En caso de elegir un estilo corto, lo más apropiado es tratar de alargar los contornos cercanos a las orejas.
Al llevar el pelo recogido siempre se aconseja dejar caer algunos mechones a los lados para darle un aspecto alargado
Considerado como el canon de belleza por las dimensiones que lo caracterizan, el rostro ovalado tiene la ventaja de ser adaptable a la mayoría de los estilos.
La frente es un poco más ancha que el mentón y, junto con las mandíbulas y los pómulos, forman casi una circunferencia.
Una de las claves que se deben tener en cuenta en este caso es que el flequillo no debe ser demasiado largo y recto porque puede acortar su longitud.
Llevarlo con la línea del medio y un poco de volumen es perfecto para lucir un estilo natural, minimalista y casual.
Las más atrevidas pueden optar por el estilo “mohawk” que consiste en llevarlo muy corto con barrido hacia el costado.
Además de tener un contorno y mandíbula cuadrada, este tipo de cara es más ancha y refleja una sensación de dureza.
Para crear contornos ovalados se pueden utilizar cepillos redondos y pinzas que, al suavizarlo, dan un efecto de volumen.
Las mujeres que llevan el pelo largo pueden optar por dejar caer mechones o rizos en los costados para cubrir la zona angulosa.
El largo aconsejado es a la altura de los hombros o un poco más corto. No se recomienda que el corte termine en la línea de la mandíbula porque lo hará lucir más ancho.
Lo más apropiado es mantener un estilo asimétrico, con un lado más largo que el otro y un flequillo amplio.
Las mujeres cuyo rostro es alargado pueden elegir un look natural que les permita conseguir un efecto de anchura.
Por lo general son caras delgadas y sin demasiados ángulos, por lo que se puede disimular usando un flequillo y un corte que no supere los hombros.
En este caso no se debe mantener el cabello pegado hacia la cara, porque se verá más delgado y largo; en su lugar se aconsejan las capas, los rizos o las ondas.
Los estilos con capas largas disminuirán la longitud del óvalo y le confieren volumen en los laterales.
Si el cabello no es rizado una buena opción es el look que va máximo a la altura de la mandíbula, nunca más corto.
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El rostro “corazón” o “diamantino” es aquel de forma triangular, de frente ancha y que se va afinando hacia el mentón.
El corte que más le favorece es aquel que lleva flequillo al costado, dado que el objetivo principal es ocultar el ancho de la frente.
Las capas largas que se inician por debajo de los pómulos y la raya en medio o ladeada también le quedan bien.
Para esta fisonomía se deben evitar los looks cortos que van por encima del maxilar, ya que estos harán que la parte superior de la cara se vea ancha.
Cabe aclarar que, por supuesto, estas son solo algunas de las recomendaciones para cada forma de la cara, porque hay muchos tipos de cortes.
Procura consultar con tu estilista de confianza cuál es el que mejor le va a tu contorno, frente y forma de la barbilla.
