¿Eres de los que se acuestan hinchados, con una sensación de pesadez que no te deja dormir tranquilo? No te preocupes. Si quieres estar más liviano y con la panza ligera, toma nota de estos consejos y empieza con el plan de acción hoy mismo.
1- HACER DEPORTE CUANDO SE OCULTE EL SOL
Llegas de la oficina cansado y lo único que quieres es tirarte al sillón a mirar tele y comer papas fritas. Vence la pereza, ponte las zapatillas y salí a hacer deporte una hora antes de la cena.
“El ejercicio, aunque sea caminar de forma vigorosa durante 60 minutos, es lo único que va a aumentar los niveles de oxidación lipídica en el organismo”, explica Giuseppe Russolillo, presidente de la Fundación Española de Dietistas-Nutricionistas.
“Los mecanismos para quemar grasas se van a mantener activados hasta horas después de haber practicado deporte.
Por eso si queremos quemar grasas mientras dormimos, lo mejor es ejercitarse por la tarde/noche”.
2-HAZ FIACA Y DUERME A OSCURAS
La hormona de la melatonina ayuda a quemar calorías. Los científicos de la Universidad de Granada comprobaron que al ingerir melatonina se estimula la aparición de un tejido adiposo encargado de quemar calorías en vez de almacenarlas.
El cuerpo humano segrega la hormona de manera natural cuando está en total oscuridad y alcanza su pico durante la noche mientras dormimos.
Así que olvídate de dejar prendido el televisor o la luz del pasillo. A partir de ahora, todo lo que puedas, hazlo a oscuras.
3- DUERME UNA HORA MÁS
Aunque no lo creas, entregarte un ratito más a los placeres del sueño, sirve para adelgazar. El doctor Michael Sivak, de la Universidad de Michigan, comprobó que durmiendo perdemos alrededor de 6 kilos al año. Resulta que cuanto más y mejor dormimos, más grasas quemamos.
Olvídate de la culpa y disfrutá de poner el despertador más tarde siempre que puedas.
4- CENA PROTEÍNAS Y FIBRAS
Es fundamental comer ligero para no llegar a la hora de dormir sintiéndote pesado y evitar despertarte como si te hubieras comido un lechón a medianoche.
Pero tampoco es cuestión de irte a acostar muerto de hambre. Una sopa de verduras y un churrasco de carne magra o una porción de pescado al horno con pan integral es la cena ideal para dormir liviano y limpiar el organismo. Si te quedas con ganas de algo dulce, puedes agregar una fruta.
5- LA FRUTA MÁGICA
Antes del sentarte a comer, disfruta de una rica fruta. Te va a servir para bajar el nivel de voracidad y disfrutar más de la cena. “Las frutas con una fuente rápida de energía y para adelgazar se recomienda tomarla antes de las comidas.
La hipoglucemia avisa al sistema nervioso central de que tenemos hambre y debemos reponer energía. Si tomamos una fruta con un aporte calórico bajo antes de comer, aportamos una glucosa que rápidamente llega a la sangre y esa señal de necesidad de comer se interrumpe”, dice la doctora Elena Alonso Aperte, vicedecana de la Facultad de Farmacia de la Universidad CEU San Pablo Alonso.
5- COME TEMPRANO
Haz como los norteamericanos y prepara la comida cuando baja el sol. Nada de cenar a las diez, once de la noche y meterse en la cama sin digerir. Conviene comer alrededor de las ocho y dejar pasar un par de horas antes de acostarte así le das tiempo a tu organismo de hacer la digestión.
Fuente: Rumbos Digital