El cambio del calendario que ocurre con el nuevo año generalmente pilla a la gente esforzándose por comprometer a llevar un estilo de vida sano. Sin embargo, cuando de perder peso se trata, los expertos recomiendan adoptar una visión más amplia que sobrepase las resoluciones del nuevo año.
La mejor forma de alcanzar y mantener un peso sano es con la adopción de un estilo de vida”, comenta el Dr. Donald Hensrud, director médico del Programa de Mayo Clinic para Vida Sana y jefe de redacción médica para la dieta de Mayo Clinic. “Uno debe seguir un patrón alimentario que sea práctico, porque cuando es demasiado restrictivo, se vuelve insostenible”, añade.
La dieta de Mayo Clinic alcanzó el primer puesto en la categoría de “dietas comerciales” en el U.S. News & World Report (Noticias de Estados Unidos e Informe Mundial).
La dieta de Mayo Clinic brinda un programa basado en la investigación y la experiencia clínica para perder peso y adoptar un cierto estilo de vida. Sepa más sobre la dieta con el libro La dieta de Mayo Clinic.
Un programa por Internet también permite acceder a planes alimentarios, recetas, planes y ejercicios para acondicionamiento físico, así como medios interactivos, tal como una aplicación iOS para los sistemas operativos de Apple.
El programa tiene dos fases que ofrecen un arranque de dos semanas para perder peso, seguido por una metodología de alimentación y salud que se adopta de por vida.
El plan alimentario gira alrededor de alimentos que sustentan la salud, como es el caso de las verduras, las frutas, las proteínas magras, los cereales integrales y las grasas sanas (frutos secos y aceite de oliva).
No hace falta contar calorías, pues la dieta se enfoca en ingerir cantidades generosas de verduras y frutas, así como en elegir productos sanos de otros grupos alimentarios.
No se excluyen alimentos tampoco, pero se restringen las porciones de los que tienen alto contenido calórico. Además, se pone énfasis en hacer actividad física durante mínimo 30 minutos para mejorar la salud en general, no solo el peso.
Se recomienda a quienes padecen afecciones que, antes de empezar cualquier dieta o plan de ejercicio, primero hablen con sus médicos.
“Cuando se hace aunque sea un pequeño cambio en la alimentación y en los hábitos de ejercicio, uno disminuye los riesgos médicos para muchas afecciones, entre ellas, enfermedades cardíacas, presión arterial alta y apnea del sueño”, acota el Dr. Hensrud.
“Eso es un regalo para usted y su familia que dura todo el año”.
