En año nuevo, perder peso es uno de los propósitos más comunes

El inicio de un nuevo año plantea infinidad de opciones para hacer cambios en el estilo de vida, que ayuden a alcanzar el bienestar integral. Perder peso es uno de los propósitos de año nuevo que más se repite, tanto por los beneficios para la salud como por el interés de lucir una mejor figura.

Para lograr un cambio significativo en este sentido, la nutricionista Angely Bonaldi recomienda plantearse metas realistas y pasar del deseo a la acción.

Ya sea que se inicie con caminatas de unos 30 minutos diarios, la práctica de alguna disciplina deportiva o una rutina de ejercicios programada en un gimnasio, una vez que se toma la decisión de adelgazar es importante hacer un cambio de hábitos, para aumentar la actividad física y alimentarse de manera saludable.

“Para lograr el objetivo de adelgazar es importante comprender que se requiere un cambio en el estilo de vida. También hay que plantearse metas realistas a corto plazo, que le permitan a la persona sentir que los nuevos hábitos que ha adoptado están dando resultado y empieza a notar mejoras en su salud”, comentó la especialista en nutrición.

Bonaldi, quien forma parte del equipo de nutricionistas de la cadena fitness Gold’s Gym, destacó las ventajas de ejercitarse en gimnasios que combinen asesoría nutricional y preparación física personalizada, ya que la persona recibe una atención integral individualizada. Adicionalmente, tiene a su alcance equipos para ejercitar las diferentes partes del cuerpo, entrenadores que le ayudan a corregir la postura y la posibilidad de participar en clases de diversas disciplinas deportivas.

En cuanto a la nutrición, recomendó: consumir porciones pequeñas en cada comida y comer al menos cinco veces al día; mantener una dieta balanceada rica en antioxidantes; tomar abundante agua durante el día, mayormente en las mañanas y las tardes; evitar las dietas relámpago que prometen una pérdida rápida de peso y suelen tener efecto rebote; además de disminuir el consumo de grasas saturadas, dulces y bebidas alcohólicas.

Otra manera de lograr el objetivo a largo plazo es plantearse propósitos sencillos, que se puedan cumplir de manera cotidiana y contribuir a la pérdida de peso, como:

· Tomar más agua

· Aumentar la cantidad de vegetales en las comidas diarias

· Consumir meriendas saludables, que incluyan frutas frescas yogurt y otras opciones ligeras como la gelatina sin azúcar

· Usar con más frecuencia las escaleras y menos el ascensor

· Hacer más deporte

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