Lucir un cuerpo esbelto y estético es el gran deseo de toda mujer. Mantener el peso ideal va más allá de la apariencia física; está comprobado que perder kilos de más tiene muchos beneficios para la salud, pero te has preguntado ¿qué pasa cuándo adelgazas rápido en tan poco tiempo?
Para bajar de manera saludable, es necesario que el cuerpo se adapte a esa pérdida hasta lograr el peso ideal. Perder mucho en poco tiempo puede provocar una descompensación, sobre todo cuando la dieta es muy severa.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos afirman que cuando se pierde peso gradualmente hay más éxito para adelgazar y mantenerse estable. Sin embargo, para que está perdida sea saludable es recomendable no sobrepasar 1 kilogramo de peso por semana.
Lento, pero seguro
El peso objetivo al iniciar un plan, combinando actividad física y dieta, va en función de los kilogramos de sobrepeso del paciente, del ritmo metabólico, edad, entre otros factores, explica la nutrióloga Graciela Pérez Moreno, miembro del Colegio Americano de Medicina del Deporte.
Por ello, describimos cuatro cosas por las que no es "tan bueno" adelgazar en poco tiempo y los problemas que se pueden desencadenar.
1. Descompensación. La nutrióloga Graciela Pérez explica que las dietas demasiado bajas en calorías ayudan a bajar muy rápido de peso pero no siempre son saludables porque en la mayoría de los casos no llegan a proveer las vitaminas, minerales y aminoácidos esenciales, lo cual pone en riesgo la salud.
La deficiencia de hierro puede provocar anemia; cuando el cuerpo carece de vitamina B12 hay problemas neurológicos o la falta de vitamina D debilita el sistema óseo.
2. Cálculos biliares. Las dietas diseñadas para adelgazar en poco tiempo pueden favorecer a la formación de cálculos biliares, explica C. Wayne Callaway, investigador de la Universidad George Washington.
Cuando se reduce drásticamente el consumo de grasa, la vesícula no se contrae con la misma frecuencia para expulsar la bilis hacia el intestino, al acumularse se pueden formar los cálculos biliares o piedras en la vesícula.
3. Deshidratación. Hay regímenes alimentarios que son hiperproteicas y muy bajas en calorías, lo cual provocan deshidratación. Cuando el cuerpo pierde agua baja el rendimiento de muchas funciones vitales.
Con la deshidratación surgen problemas del corazón y circulación; el cerebro no funciona adecuadamente, hay dificultad para desechar las toxinas y agotamiento, entre otras consecuencias.
4. Riesgo al corazón. La Fundación Española del Corazón (FEC) aconseja desconfiar de las dietas que prometen bajar más de 1 kilogramo por semana por los riesgos de sufrir alguna enfermedad cardiaca.
Las dietas altas en proteínas pueden provocar deshidratación por la pérdida de minerales esenciales para el sistema cardiovascular, como el potasio y sodio. Al mismo tiempo, hay riesgo de atrofia muscular lo cual perjudica el músculo cardíaco.
Las dietas muy restringidas que aportan sólo 1.200 calorías al día ponen en riesgo la salud y puede llevar a la desnutrición.
Recuerda que para bajar 1 kilogramogramo por semana se deben consumir 1,000 calorías menos por día. Esta cantidad se puede restar cuando se consumen más de 4,000 calorías diarias, pero cuando se obtienen 2,000 diarias genera una descompensación, afirma la nutrióloga Pérez Moreno.
Agrega que por ello, lo más saludable es disminuir el consumo de calorías aumentando el gasto con actividad física constante.
No hay recetas mágicas para bajar rápido de peso, lo ideal es cuidar la alimentación y combinarlo con ejercicio regular. No comprometas tu salud y antes de iniciar algún plan para adelgazar es preferible consultar a un nutriólogo.