El peor brote del virus ébola ha llegado al país más poblado de África, Nigeria. Pero el brote de ébola no es la única epidemia que amenaza al mundo. La humanidad ha olvidado el peligro de las viejas epidemias que se hacen recordar con nuevas cepas.
Los médicos aún no han aprendido a combatirlas. Este virus es tan astuto que consigue cambiar antes de que se encuentre un remedio para vencerlo. Se necesita una nueva vacuna para cada nueva cepa, y así sucesiva e infinitamente, subraya el semanario ruso 'AiF'.
Consejos: Vacúnese. Mantenga una buena higiene. Tome vitamina D y baños de sol.
Estafilococo dorado
Es una infección muy peligrosa capaz de devorar la carne humana y los órganos internos. No responde al tratamiento antibiótico convencional y resulta en la muerte del paciente en el 31% de los casos. Los síntomas son difíciles de reconocer, ya que son similares a otras manifestaciones de trastornos internos, por lo que la infección solo puede ser detectada en una etapa avanzada. Puede afectar a cualquier persona y es difícil de curar.
Consejos: Mantenga una buena higiene. Use curitas y evite cualquier penetración bacteriana en las heridas en la piel. Asegúrese de que los médicos que le tratan utilicen instrumentos estériles. No comparta con nadie artículos de higiene personal.
'Clostridium difficile'
Son unos bacilos que se transmiten por vía fecal-oral. La enfermedad se desarrolla rápidamente: solo en una semana una persona se deshidrata. El tratamiento puede durar hasta seis meses: los clostridios son extremadamente resistentes a un gran número de fármacos. El paciente puede necesitar cuidados y alimentación especiales, e incluso una operación para restaurar las paredes intestinales.
Consejos: Lávese siempre las manos con jabón y evite las toallitas húmedas. Beba probióticos.
Bacterias Gram negativas
Así se denomina a las bacterias que se han vuelto más resistentes a los antibióticos. Una de ellas, la 'Pseudomonas aeruginosa', en 2009 se 'comió' en solo unas semanas a la modelo brasileña Mariana Bridi da Costa.
Consejos: Uno de los focos de infección por esta bacteria son los quirófanos. Por lo tanto, la única manera de reducir al máximo las posibilidades de contagio es asegurarse de que el centro sanitario que nos trata presenta un bajo porcentaje de infecciones.
La morbilidad aumenta porque las cepas se hacen menos resistentes a los fármacos y los humanos perdemos inmunidad a la tuberculosis.
Consejos: Es casi imposible evitar la infección por tuberculosis porque es bastante básica. Pero si usted ya está infectado no deje la medicación ni modifique la dosis, incluso si los síntomas han desaparecido, puesto que la infección puede permanecer en su cuerpo, mutar y extenderse a otra persona.