¿Cuántas veces te has aguantado las ganas de hacer pipí? Retardar tu visita al baño puede ocasionar daños a tu salud, ya que puede generar desde infecciones hasta cálculos renales.
De acuerdo con información publicada en The Huffington Post, una vejiga promedio tiene la capacidad para albergar alrededor de 8 vasos de agua, por lo que después de esa cantidad es necesario liberar espacio a través de la orina.
El Australian Government Department of Health detalla que las personas eliminan entre 200 y 500 mililitros de orina cada vez que visitan el baño, lo cual puede ocurrir entre 4 y 6 veces al día. ¡No te aguantes!
Sin embargo, cuando una persona se aguanta las ganas de orinar, la vejiga se puede estirar o acumular bacterias que dañan al organismo y podrían poner en peligro tu vida. ¡Conoce las consecuencias!
Cistitis intersticial. El National Kidney and Urologic Diseases Information Clearinghouse (NKUDIC) señala que este padecimiento se caracteriza por la necesidad de orinar con frecuencia y urgencia, acompañado de dolor. Se presenta por diferentes causas, pero una de ellas es la infección bacteriana causada por aguantarse las ganas de orinar.
I
nfección urinaria. Cuando te esperas mucho tiempo para orinar se acumulan diferentes bacterias, las cuales entran en las vías urinarias y dañan tu cuerpo. Incluso, la infección puede impactar a los riñones, según el NKUDIC.
Cálculos renales. También conocidos como piedras en los riñones, son cristales sólidos que se forman en el riñón por sustancias que se encuentran en la orina. Se forman debido a una infección urinaria ocasionada por la falta de ir al baño.
Pielonefritis. Es una infección del tracto urinario que inicia en la uretra o en la vejiga, pero si no se trata a tiempo puede causar daños importantes al riñón. Una de las causas es la obstrucción del tracto urinario o por aguantarse las ganas de ir al baño.
Reflujo vesico-uretral. Este padecimiento se genera cuando la orina regresa a la uretra y riñones, lo que detona infecciones en el tracto urinario. Se detona por bacterias acumuladas por aguantarse las ganas de ir al baño.