APUNTE.COM.DO, Santo Domingo. RD. En un mundo acelerado, donde el trabajo, los estudios y las obligaciones diarias consumen gran parte de nuestro tiempo, dedicar horas de calidad en el hogar se ha convertido en un acto esencial para mantener el equilibrio emocional y fortalecer los lazos familiares.
Expertos en salud mental coinciden en que pasar tiempo en casa permite reducir el estrés, mejorar el descanso y favorecer actividades que estimulan la creatividad, como la lectura, la cocina, la jardinería o simplemente compartir una conversación sin prisas.
Además, el hogar ofrece un ambiente seguro que permite desconectarse del ruido exterior y reconectarse con uno mismo. Las rutinas caseras, como preparar una comida en familia o disfrutar de una película juntos, no solo generan recuerdos duraderos, sino que fortalecen el sentido de pertenencia y unión.
En el plano físico, permanecer en casa también ayuda a establecer hábitos más saludables: comer a horas regulares, dormir mejor y tener mayor control sobre la higiene y el ambiente.
En tiempos donde las distracciones tecnológicas y el ritmo laboral son constantes, reservar momentos para la vida hogareña es más que un lujo: es una inversión en bienestar y felicidad.