La migraña es un dolor de cabeza pulsátil e intenso, que habitualmente afecta un costado de la cabeza, aunque puede afectar a ambos.
El dolor empieza repentinamente y puede estar acompañado de síntomas visuales, neurológicos, o gastrointestinales.
Su duración puede variar entre 2 y 72 horas y el dolor que produce puede ser tan agudo que puede incapacitar a la persona por completo.
Casi un 95% de la población en países del primer mundo sufrirá en algún momento de su vida algún episodio. Un 14 % de forma recurrente, y un 30% le aparecerá de forma crónica.
Las mujeres se ven más afectadas en proporción de 4 mujeres por cada varón.
Causas que pueden provocar la migraña
Existen varios factores que pueden desencadenarlas como:
Cambios hormonales en las mujeres
En las mujeres suelen aparecer episodios antes de la menstruación, debido al descenso en los niveles de estrógenos.
Los anticonceptivos orales puede ser un factor determinante.
Algunos alimentos y bebidas pueden desencadenarla.
Por ejemplo el alcohol, especialmente el vino tinto, las carnes en conserva con nitratos, o productos que contienen tiramina (vino, higos, pescado ahumado, o las nueces).
Factores emocionales
En épocas que estamos bajo estrés, preocupaciones, ansiedad, depresión… o puede surgir como manera de no adaptarse a situaciones de cambio.
Factores ambientales
Altas temperaturas, luces deslumbrantes, las pantallas del ordenador, olores fuertes, las elevadas altitudes, cambios en la presión atmosférica…
Soluciones y prevención
• Al realizar algunas recomendaciones relacionadas con los síntomas, las personas que sufren migraña pueden prevenirla.
• Para evitar casos de migraña es importante averiguar qué alimentos motivan la inflamación.
• Llevar una dieta controlada para evitar los intensos dolores de cabeza.
• Evitar la ingesta de alcohol y café que pueden desencadenarla.
• Los frutos secos, el chocolate, y la comida china se asocian con la aparición de migraña. Es importante comer varias veces a lo largo del día en horarios regulares.
• Mantener hábitos de sueño saludable, descansar las horas suficientes y con el horario constante, de esa manera se puede evitar.
• Realizar ejercicio suave para mantener bajos los niveles de estrés y ansiedad.
• Consultar al especialista antes de medicarse.
El consumo excesivo de medicamentos analgésicos, pueden derivar en una cefalea secundaria por abuso de los mismos.