Guadalajara, México - El hecho de sufrir accidentes o caídas que derivan en lesiones cerebrales aumenta la problemática de dificultades en el lenguaje, principalmente en los niños, afirmó la especialista Elizabeth González Flores.
La fonoaudióloga adscrita al Hospital General Regional No. 180 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), explicó que afecta más a los niños debido a que su organismo, incluido el sistema nervioso central (cerebro), está en pleno desarrollo.
“Esto es común en pacientes que vemos del servicio de Neurología, niños que hablaban muy bien pero tras una caída ya no quisieron volver a hablar ni caminar, esta afasia se asocia a daños o lesiones cerebrales”, dijo la especialista del IMSS Jalisco.
Añadió que por lo regular la afasia cerebral es diagnosticada hasta en un 30 por ciento de los pacientes atendidos en el servicio de Fonoaudiología de este hospital entre niños y adultos, aunque con mayor prevalencia en pediátricos, básicamente infantes en edad preescolar de entre uno y tres años de edad.
Alteraciones en el habla
Indicó que la afectación se produce en el hemisferio dominante del cerebro, en donde se regula la función del lenguaje, básicamente en el área de broca. El paciente se enfrenta a que su sistema o procesamiento del habla se ve alterado orgánicamente dado que no es capaz de producir ni siquiera sonidos.
“De alguna manera su cerebro olvida la manera de articular el lenguaje, por lo que es necesario brindarle una terapia de asociación incluso de sonidos con objetos para que emita poco a poco palabras, porque no se trata de una persona muda sino afásica”, destacó González Flores.
Refirió que de hecho en este tipo de pacientes se utiliza una técnica basada en el aprendizaje de idiomas, en que reaprende todo lo que conlleva el lenguaje a través de la asociación y prácticamente empieza “desde cero”.
Aunado a los golpes en la cabeza, dijo que la afasia puede producirse por eventos como hemorragias y tumores cerebrales, infecciones severas como meningitis o encefalitis, o dificultades a partir del nacimiento como hipoxia (falta de oxigenación en el cerebro durante el parto), eclampsia en la mamá, placenta previa o incluso prematurez.
Agregó que la afasia no debe confundirse con otro tipo de padecimientos como el autismo, dado que la pérdida del habla en ciertos casos va acompañada -cuando es de tipo acinética- con una dificultad para reaccionar a estímulos externos por lo que su manejo es complejo y multidisciplinario
“Estos casos son serios, el paciente no se mueve, no te ve, pareciera autista pero la diferencia es que el que tiene autismo a pesar de su problema interactúa con los demás porque se mueve, camina, te mira, hace todo, el acinético no tiene movimiento, se queda pasmado”, detalló la también experta en psicoterapia.
Añadió que las posibilidades de recuperación serán mayores si el paciente es detectado de forma oportuna, las cuales según la experiencia del servicio es de hasta un 70 por ciento.