Estás acostumbrado a darlo todo y nunca recibir nada.
Muchas veces estamos cansados de tantas decepciones amorosas, de tantos corazones rotos, de ver a los amigos, a la familia, a todos con pareja felices, algunos casados ¿y nosotros?
Es difícil y más cuando sabes que no es por tu culpa. Siempre lo entregas todo y los demás nunca dan nada. Duele ver cómo rompen tu corazón en mil pedazos una y otra vez pero esto no se significa que tenemos que dejar de creer en el amor.
1. Cierras tu corazón
Esto no es bueno. Por más mal que terminara tu último corazón roto, tienes que darte la oportunidad de creer en el amor.
2. Quieres volverte un rompe corazones
Tú no eres así, ese no es tu estilo y aunque rompan tu corazón unas mil veces tú jamás harías lo que a ti te hicieron.
3. Haces todo lo posible por evitar el contacto con una persona que sabes que te puede interesar
Porque algunas personas no te valoraron no quiere decir que todos sean iguales. ¡En algún lugar del mundo está en amor de tu vida!
4. Dices que amas tu soltería
Pero nadie te lo cree. Si no te convences tú mismo de que debes estar bien solo primero para estar con alguien, entonces no podrás avanzar.
5. Crees que nunca más te volverás a ilusionar
¡Eso es mentira! Todo llega a su tiempo y en el momento menos esperado va a llegar esa persona que te haga olvidar todo lo pasado. Alguien que te haga volver a creer en el amor.