(CNN) - La primera persona diagnosticada con virus del Ébola en el Reino Unido regresa al hospital con una complicación del virus.
Pauline Cafferkey, quien fue dada de alta inicialmente del hospital en enero, después de recuperarse del virus, está siendo tratada en una unidad de máximo aislamiento en el Royal Free Hospital de Londres
El hospital dijo en un comunicado que Cafferkey, una enfermera, había sido admitida en la madrugada del viernes "debido a inusual complicación tardía de su anterior infección por el virus del Ébola".
Ella ha sido transferida allí desde el Queen Elizabeth University Hospital en Glasgow, donde ha sido tratada en la unidad de enfermedades infecciosas desde el martes después de sentirse mal, según la declaración del Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés).
La Dra. Emilia Crighton, Directora de Salud Pública para el NHS Greater Glasgow y Clyde, dijo en un comunicado que el riesgo para el público por la condición de Cafferkey era "muy bajo".
"De acuerdo con los procedimientos normales en casos como este, hemos identificado una pequeña cantidad de contactos cercanos de Pauline a quienes les estaremos dando seguimiento como medida de precaución", dijo.
El virus solo se puede transmitir por contacto directo con la sangre o fluidos corporales de una persona infectada.
Trabajó en Sierra Leona
En diciembre, la residente de Glasgow de 39 años de edad, se convirtió en la primera persona en ser diagnosticada con el virus en el territorio del Reino Unido, poco después de regresar de Sierra Leona.
Cafferkey contrajo el virus mientras trabaja con Save the Children en un centro de tratamiento de ébola, según Michael von Bertele, director humanitario de esa organización.
Cinco días más tarde, el Royal Free Hospital anunció que su estado se había deteriorado y era crítico. Pero en enero fue dada de alta y el primer ministro británico, David Cameron, se contó entre los que tuitearon sus felicitaciones.
Cafferkey no es la primera profesional de la medicina que resulta con problemas después de haber sido diagnosticada libre del ébola.
El doctor estadounidense Ian Crozier fue tratado por ébola en Atlanta el año pasado y fue declarado libre del virus en su sangre... pero más tarde se descubrió que el virus estaba viviendo en su ojo.
