Tal vez estés en una etapa de tu vida donde te sientas amargado, pero eso puede cambiar si buscas el apoyo de un experto.
Los médicos especialistas de Voy al Doc nos dicen por qué a veces nos sentimos amargados y cómo podemos poner alto a esta situación para poder disfrutar de la vida.
¿Alguna vez has sentido que el mundo entero se puso de acuerdo para actuar en tu contra? ¿Cada vez se vuelve más difícil la convivencia con tu pareja, tus hijos, tus compañeros de trabajo, tus amigos y la gente en general?
¿Varias personas se han sorprendido de tu mal humor y te lo han hecho notar diciéndote amargado? ¿Cada vez te sientes más confundido y aislado de la sociedad?
Probablemente lo que más te molesta de toda la situación es que comienzas a pensar que todos los que te dicen que eres un amargado quizá tengan algo de razón… ¿Crees que has llegado a un punto en tu vida en el cual estás irremediablemente amargado y solo? ¡Espera! No tienes por qué sentirte así.
¡Busca ayuda!
Existe un sistema de tratamiento psicológico llamado terapia racional emotiva conductual que podría ayudarte a dejar de sentirte aislado, enojado, confundido o frustrado.
Esta terapia puede explicarte, en primero lugar, qué situaciones en tu vida han provocado que te sientas así y, en segundo lugar y lo más importante, puede ayudar a que los sentimientos negativos que estés experimentando, desaparezcan y se transformen en emociones positivas, como tranquilidad, agradecimiento y felicidad.
Este tipo de terapia fue creada por el psicólogo estadounidense Albert Ellis y actualmente es utilizada en todo el mundo para tratar, exitosamente, a millones de personas que sufren de infelicidad, angustia, depresión, frustración y otros conflictos emocionales.
La terapia racional emotiva conductual nos ayuda a darnos cuenta de que la mayoría de las personas compartimos una serie de creencias que tomamos por ciertas, pero que en realidad no tienen una explicación racional o lógica y que no son necesariamente verdaderas.
Estas creencias irracionales, que fueron descritas por el psicólogo Albert Ellis, incluyen ideas que seguramente has aprendido, consciente o inconscientemente, desde que eras pequeño.
Algunas de estas creencias son:
- Ser amado y aceptado por todo el mundo es una de las necesidades principales del ser humano.
- Las personas se consideran “buenas” sólo si son productivas y capaces.
- Nuestro pasado nos perseguirá por siempre.
- Cuando nos suceden cosas malas, no hay nada que podamos hacer para evitarlas.
- La persona que no actúa “correctamente” o de acuerdo a lo que los demás esperan, es mala y debe ser castigada de algún modo.
¿Qué tienen que ver estas ideas irracionales con el hecho de que no te sientas feliz y que la gente lo note? Pues, ¡tiene mucho que ver!
Al acudir a una terapia racional emotiva conductual, podrás descubrir que gran parte de nuestra infelicidad se debe a que tenemos una noción idealizada acerca de cómo debe ser una persona feliz, plena y funcional.
Es decir, cuando nos damos cuenta de que nosotros no encajamos en ese molde idealizado, nos sentimos menos y muy enojados.
Además de estas creencias irracionales, la terapia racional considera también ciertas exigencias que nos hacemos a nosotros mismos, le hacemos a los demás e, incluso, le hacemos al mundo entero.
Obviamente, estas exigencias al no ser cumplidas nos provocan mucha frustración, confusión y tristeza.
Con la ayuda de un psicólogo que trabaje con este tipo de terapia, y después de hacer una revisión profunda de tu historia, será más sencillo dejar atrás ese malestar emocional y podrás volver a disfrutar de tu día a día, de tu pareja, de tus hijos, de tu entorno laboral y de tus amigos.
¿Ves como no estás amargado? Simplemente estás viviendo una situación negativa que no sabes cómo manejar o enfrentar, pero la cual, con la ayuda de un psicólogo, seguramente podrás superar.
La terapia racional tiene además un sinfín de aplicaciones, y puede beneficiar a muchas personas en distintos tipos de situaciones. Puede, por ejemplo, utilizarse en niños para ayudarlos en su desempeño escolar y a lograr un desarrollo emocional más saludable. También se puede utilizar para tratar problemas de autoestima, de manejo inadecuado de la ira, alcoholismo, violencia en parejas y disfunciones sexuales.
Por desgracia, hoy en día la mayoría de la gente se resiste a solicitar los servicios de un psicólogo y seguir algún tipo de terapia. Existe una especie de estigma social y muchas personas ven mal que se recurra a este tipo de especialistas.
Sin embargo, debemos considerar a los psicólogos simplemente como lo que son: profesionales que saben cómo ayudarnos a resolver ciertos problemas que nosotros no sabemos cómo manejar. Al igual que acudimos a otros tantos especialistas cuando nos enfermamos, los psicólogos pueden ayudarnos cuando no estemos emocionalmente saludables.
Anímate a buscar los servicios de un psicólogo que trabaje con terapia racional emotiva conductual y encuentra una manera más sencilla de ser feliz y pleno.
