Alexandra Allen, sufre de urticaria acuagénica, una enfermedad rara que afecta a 50 personas en el mundo.
08 de Abril del 2015 - 14:01 | Estados Unidos -
"Sientes como si tu piel fuera un papel de lija muy delgado. Pica, pero no te puedes rascar porque sino se rompe y comienzas a sangrar", son las expresiones de Alexandra Allen, quien sufre de urticaria acuagénica o alergia al agua, una enfermedad rara que afecta a 50 personas en el mundo.
Para descubrir su padecimiento la joven estadounidense tuvo problemas debido a que cada análisis médico la encontraba saludable. Al final ella fue quien descubrió su mal cuando leyó un artículo sobre urticaria acuagénica publicado en Internet y tras varias pruebas con un dermatólogo confirmó que sus problemas estaban en el agua.
Las consecuencia de la alergia en Allen son graves por ello toma tres duchas cortas y con agua fría por semana. Además debe permanecer en lugares fríos (refrigerados) dado que las ronchas aparecen solo por mojarse, hasta su transpiración es peligrosa.
"Es como si hubieras estado sumergido en un tanque de ácido, no por mucho tiempo, pero lo suficiente para arrancarte una capa de piel", sostiene.
La urticaria acuagénica (UA) es una forma poco frecuente de la que existen casos escasos en el mundo. Fue reportada por primera vez en 1964. En la actualidad, para testearla, se coloca una compresa de agua de 35°C sobre la piel por 30 minutos.
El análisis determina la aparición de una roncha y, por ende, el diagnóstico del padecimiento. A pesar de los avances científicos, aún no se conocen en forma completa los mecanismos que la accionan. Algunos especialistas la atribuyen a una toxina producida por las glándulas sudoríparas al contacto con el H2O. Otros, sin embargo, creen que se debe a una sensibilidad extrema de la piel a algunos aditivos del agua, como el cloro.
La enfermedad no tiene cura y es degenerativa, por lo que al contacto con el agua sus reacciones serán cada vez más fuertes.