¿Qué es la ventana metabólica?

Cuando sometemos el cuerpo a la actividad física, se libera energía proveniente de los carbohidratos que están dentro de los músculos, que se conocen como glucógeno; también en dicha liberación de energía participa la degradación de grasas y proteínas, sobretodo si se trata de una sesión prolongada de ejercicio.

El organismo es una máquina perfecta, con sus huesos, músculos y articulaciones para moverse, con sus órganos y aparatos para brindar las funciones requeridas para subsistir y con sus terminaciones nerviosas para establecer contacto con el exterior.

Nunca deja de trabajar, desde el nacimiento hasta la muerte, solamente adecúa su desempeño conforme a los períodos de actividad o de descanso. Lo único que requiere es de todos los nutrientes para reponer células, puesto que son ellas quienes conforman todo el cuerpo viviente.

Hablando de adecuaciones, cuando sometemos el cuerpo a la actividad física, se libera energía proveniente de los carbohidratos que están dentro de los músculos, que se conocen como glucógeno; también en dicha liberación de energía participa la degradación de grasas y proteínas, sobretodo si se trata de una sesión prolongada de ejercicio.

Al finalizar la actividad, los depósitos de glucógeno se han agotado, y ante esta carencia, los músculos, aparatos y sistemas demandan una reposición. Inmediatamente después de terminar de hacer ejercicio y hasta 45 minutos después, es cuando mejor se absorben los nutrientes gracias a la carencia mencionada; a esto es lo que se le conoce como ventana metabólica, agudizándose los 15 primeros minutos, después va descendiendo… Una vez que se absorben estos nutrientes, se destinan a dos partes: a los músculos y al hígado.

Según un estudio realizado por la Unidad de Medicina Deportiva del Hospital Bispebjerg en Dinamarca, consumir proteína inmediatamente después de entrenar ayuda a la hipertrofia muscular.

Otro estudio de Medicine & Science in Sports & Excercise demostró que la ingesta de proteína durante la ventana metabólica acelera la síntesis proteica y, como consecuencia, la regeneración muscular.

Por lo tanto, esta ventana hay que aprovecharla para ingerir alimentos como fruta fresca o seca, barras energéticas y proteínas, de preferencia la caseína que se encuentra en la leche y en los suplementos alimenticios.

Una buena alimentación es pieza clave para el rendimiento deportivo, no importa qué tan disciplinado seas en tus sesiones de entrenamiento, si no abasteces de manera eficiente a tu cuerpo de combustible y alimentos, nunca podrás llegar a tus metas.

Los deportistas que experimentan la falta de hambre después del entrenamiento o de la competencia, deben crearse el hábito de recargar de reservas su organismo, que es cuando mejor las puede absorber, aprovechar y utilizar; solo es cuestión de abrir el abanico de posibilidad para saciar la ventana metabólica… cabe añadir que el hambre tiene lugar cuando el cuerpo está muy carente de energía (alimento), así como es un signo de deshidratación la sed.

Hay que proveer a nuestro organismo de todo lo necesario antes que a gritos lo pida; después de todo, hace mucho por mantenernos vivos… Al terminar tu ejercicio o una competencia, aprovecha éste periodo ventana para comer un saludable refrigerio rico en proteínas, carbohidratos y vitaminas; lo agradecerá tu cuerpo.

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