La vitamina A, o su precursor, el beta-caroteno, se encuentra en las zanahorias o las espinacas y asegura el buen mantenimiento, y la reparación de las células de la piel y el tejido. Si usted es deficiente en vitamina A, se puede notar una piel seca o escamosa, porque su piel no se está reparando lo suficientemente rápido.
La vitamina A se puede encontrar en frutas y hortalizas de color rojo, naranja y amarillo, o también en vegetales verdes oscuros.
Esta vitamina se usa también para problemas de la piel que incluyen el acné, el eczema, la psoriasis, el herpes labial, las heridas, las quemaduras, las quemaduras de sol, la queratosis folicular (la enfermedad de Darier), entre otras..