La ingesta de líquidos es determinante para el buen funcionamiento del organismo, pues contribuye a optimizar los procesos celulares y a mejorar el desempeño de, prácticamente, todos los sistemas vitales.
Por ello, el consumo de líquidos debe ser una prioridad, sobre todo cuando se realiza una actividad física como la práctica de un deporte, ya que proporciona minerales y otras sustancias que ayudan a mejorar el desempeño general.
Si bien hay una vasta y variada evidencia científica sobre los beneficios del ejercicio y la actividad física para el organismo, la importancia de una adecuada hidratación durante la realización de actividad física es un tema que todavía no se difunde con la misma perseverancia.
De acuerdo con las investigaciones del doctor Robert Murray, uno de los expertos mundiales con mayor conocimiento en temas de nutrición deportiva, las llamadas “bebidas deportivas”, es decir aquellas que contienen electrolitos y se recomiendan para hidratar al cuerpo antes, durante y después de realizar actividad física intensa, son una excelente vía para consumir agua, sales y azúcares que mejoran la respuesta física y mental durante el ejercicio.
“Además de mejorar varios aspectos del desempeño físico y cognitivo, el consumo de azúcar durante el ejercicio también aumenta el deseo de ingerir voluntariamente más líquido, mejora la respuesta al estrés de la actividad intensa y prolongada, reduce la percepción de agotamiento y mantiene activos importantes aspectos del sistema inmunológico”, destaca el profesor asociado de la Universidad de Ohio, Robert Murray, en su estudio Sugar, sport drinks and performance.
Murray, quien participará en la edición 2014 de la Serie Científica Latinoamericana, es miembro del Colegio Americano de Medicina del Deporte (ACSM, por sus siglas en inglés) y gerente principal de Sports Science Insights, un grupo de consultoría que colabora con empresas y organizaciones en temas relacionados con las ciencias del ejercicio y de la nutrición deportiva.
La investigación del Dr. Murray sobre las necesidades de hidratación de los atletas y las respuestas fisiológicas y de rendimiento al consumo de líquidos, de hidratos de carbono y electrolitos, ha contribuido a una mayor comprensión sobre la importancia de estar bien hidratado durante el ejercicio y sobre el papel que los hidratos de carbono y electrolitos juegan en ayudar a deportistas y no deportistas por igual, a obtener el máximo rendimiento durante la actividad física.
“Consumir bebidas deportivas durante una actividad física intensa para reponer la sal y el agua que se pierden al sudar, y adicionar azúcares al músculo esquelético y al sistema nervioso central, es quizá la forma más fácil y menos costosa para mejorar el desempeño de cualquier persona que realiza ejercicio”, destaca el también miembro honorario de la Academia de Nutrición y Dietética.
Aunque no hay una definición universalmente aceptada de lo que significa “bebida deportiva”, el Dr. Murray explica que se trata, básicamente, de una bebida con carbohidratos y electrolitos diseñada para ser consumida durante la actividad física, contiene hasta 8% de carbohidratos (como monosacáridos, disacáridos y oligosacáridos) y minerales como sodio, cloruro, potasio y otros electrolitos que se pueden perder durante la sudoración.
El experto considera a este tipo de bebidas como una opción para mantener una adecuada hidratación y para reponer elementos esenciales para el mejor desempeño físico y mental durante la realización de alguna actividad deportiva.
Fuente:
Murray R. Sugar, Sports Drinks, and Performance. Fructose, High Fructose Corn Syrup, Sucrose and Health. J.M. Rippe, ed. New York, NY: Humana Press, 293-308, 2014