Apunte.com.do (El Gran Santo Domingo). Ramiro Estrella, Director.
REDACCIÓN INTERNACIONAL SALUD.- Un equipo de científicos del Moffitt Cancer Center (EE. UU.) ha identificado un avance crucial en el tratamiento del cáncer de próstata localizado: las pruebas de clasificación genómica (GC), capaces de frenar el crecimiento de los tumores. Sin embargo, a pesar de su potencial, se destaca la necesidad urgente de más datos sobre su costo-efectividad y utilidad clínica, especialmente en poblaciones raciales y étnicas, como los hombres negros.
El cáncer de próstata, el más común entre los hombres, presenta un desafío para los médicos al determinar el tratamiento adecuado. Herramientas tradicionales, como las pautas del NCCN, pueden ser inexactas, llevando a tratamientos excesivos o insuficientes. Las pruebas genómicas como Decipher, Prolaris y Oncotype DX Genomic Prostate Score ofrecen una visión más precisa de la agresividad del tumor, pero su uso sigue siendo inconsistente debido a las pautas contradictorias.
Una revisión exhaustiva publicada en 'Annals of Internal Medicine', dirigida por Emir Alishahi Tabriz, evaluó 19 estudios para analizar el impacto de estas pruebas en la estratificación de riesgos y decisiones de tratamiento. Los hallazgos muestran que, en la mayoría de los casos, las pruebas genómicas no modificaron significativamente la clasificación de riesgo de pacientes con cáncer de próstata de bajo riesgo. Sin embargo, las pruebas basadas en GPS y Decipher mostraron diferentes tasas de reclasificación, destacando la necesidad de investigaciones más profundas para comprender el impacto real de estas tecnologías en el tratamiento del cáncer de próstata.
Este avance podría cambiar el panorama de los tratamientos para esta enfermedad, brindando una herramienta clave para personalizar el enfoque y optimizar la salud de los pacientes. Sin embargo, los investigadores subrayan la importancia de ensayos bien diseñados para validar su efectividad en la práctica clínica.
