Cocinar arroz blanco es una de las tareas más complejas de la gastronomía. Aunque parezca sencillo, lograr un perfecto arroz tiene su ciencia.
Por lo general, la gente lo prepara del modo convencional, sofriéndolo y luego cociéndolo en agua con la olla tapada. No obstante, esta versión es al horno, para aquellos que buscan una alternativa y experimentar nuevas técnicas.
En el horno obtiene una textura diferente y superllamativa, pues queda un poco más seco y tierno. Sea usted quien determine qué tan buena es esta opción.
Ingredientes (para 2 o 3 personas)
1 taza de arroz blanco crudo
2 cucharadas de mantequilla, separadas en pequeñas porciones
Sal al gusto
2 tazas de agua hirviendo o caldo de su preferencia (res, pollo, vegetales)
Preparación
Engrasar una bandeja para horno con un poco de aceite de oliva y precalentar el horno a 200 °C. También se puede utilizar bandejas desechables de aluminio. Poner el arroz blanco crudo en una capa uniforme sobre la bandeja y colocar varias porciones de mantequilla en la parte superior de modo que quede bien distribuida. Sazonar con sal al gusto.
Cortar un trozo de papel aluminio lo suficientemente grande para cubrir la bandeja. Verter 2 tazas de agua hirviendo o del caldo de su preferencia sobre el arroz. Cubrirlo de inmediato y cerrar herméticamente para que no se escape el vapor.
Cocinar en el horno precalentado por 20 minutos. Al pasar este tiempo, con un tenedor, verificar si ya está cocido. Si lo está, darle otro toque de horno por 5 minutos pero esta vez, sin el papel de aluminio. Servir caliente con la proteína de su preferencia.
Fuente: Cocina y Vino
