El baño del niño debe ser un momento de placer y diversión. Muchas veces se presentan problemas a esa hora, ya que lo toman como una obligación o una tarea densa.
El trabajo de los padres es hacerlo divertido, pero siempre tomando las precauciones necesarias. Sin importar la edad que tengan, los niños siempre aman los juguetes.
Muchos de ellos están diseñados para ser jugados en el agua como:
Sirenas, barcos, ruedas de agua, peces, lo van a ver como una oportunidad para disfrutar y jugar.
¡Debes equiparte con los productos necesarios para preparar la diversión en el baño!
Colorear el agua
Puedes utilizar tabletas para teñir el agua, o un poco de colorante alimenticio para darles la idea que es un océano. Añadir algunos peces de juguetes, barcos o animales marinos, ¡realmente va a ser una fiesta!
Burbujas
A los niños les encantan las burbujas, jugar, colocarlas en su cabeza o en su cuerpo como una barba o un muñeco de nieve.
Debes tener precaución de que el jabón no irrite la piel. Si los niños son muy pequeños, suelen tener la piel muy sensible.
Juguetes de baño
Existen infinidad de juguetes para poner en la bañera de los niños, desde delfines, patitos… algunos vienen para apilar y hacer figuras.
También hay pinturas y lápices de colores para usar en el baño, pueden colorear la bañera y decorar el baño como les guste.
Es una manera de fomentar la creatividad y aprender a trazar letras o números según la edad del niño.
Libros
Si le gusta leer, hay libros especiales hechos de grasa y cubiertos de plástico, lo que les permite flotar.
Son masticables, blandos y no se rompen.
Son muy populares en los niños en edad preescolar, ya que tienen imágenes de varios colores y grandes palabras impresas. Fáciles de limpiar, una excelente idea para que disfruten y aprendan.
Música
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Es un momento ideal para poner música, cantar y escoger canciones. Cantar con ellos es lo ideal, de esa manera se divierten y comparten un momento con la familia.
Si es un momento agradable lo va a tomar como una rutina, se va a adaptar, y se va a acostumbrar a estar relajado sabiendo que va a pasar un buen momento con mamá o papá.