La piel nos acompaña día a día, y saber cuidarla es fundamental para después no lamentar no haberlo hecho conforme va pasando el tiempo. Por eso, en este caso hablamos de saber mimar nuestra dermis, y de hacer todo este proceso justo antes de irnos a dormir.
Si no sabes cómo hacerlo, te damos una serie de puntos clave para que lo tengas en cuenta.
Limpia tu piel, pase lo que pase
El trabajo, el día en sí, el cansancio, las pocas ganas, la hora… Sí, todas tenemos miles de excusas cada día para acostarnos sin limpiar la dermis, pensando que mañana será otro día.
Y efectivamente lo será, pero es mejor que limpiemos siempre la piel, aunque no nos hayamos maquillado.
Hemos de limpiar en profundidad la cara para que no tenga impurezas ni sufra por la contaminación, el sudor, el paso del tiempo…
Desmaquillante según tu dermis
Es algo evidente, pero necesario que lo recordemos: no todas las pieles son iguales.
Sí, es cierto, no todas las pieles son grasas o secas, algunas son mixtas, algunas se secan dependiendo de la temperatura, por cuestiones genéticas, o tienen brotes de acné.
Todo dependerá del propio paso del tiempo. Tenemos que cuidar la piel cada día, así que hay que elegir desmaquillantes que verdaderamente cubran las necesidades de la naturaleza del rostro de cada una de nosotras.
Tónico para marcar esta limpieza
Elimina los restos de desmaquillante si es demasiado graso, por ejemplo. Es genial para cuidar la piel y que esté desmaquillada y limpia antes de dormir.
Hidratación y serum
Dos pasos fundamentales para que la cara esté verdaderamente cuidada. Una piel hidratada se nota y, podemos utilizar un serum para conseguir una piel perfecta.
Contorno de ojos y vaselina para los labios
Estos dos toques finales puedes hacerlos incluso en la cama. La vaselina es opcional, ya que estamos hablando de piel, pero irá bien para tus labios.
En cuanto al contorno, es fundamental para reducir arrugas, patas de gallo y demás.
Fuente: Nosotras
