En caso de cefalea tensional por estrés físico o mental, o migraña:
Agua fría y caliente. Para la cefalea tensional, aplicar agua caliente (baño, ducha o compresa), ya que relaja los músculos contraídos.
También conviene masajear la zona de la nuca y hombros o presionar el punto más elevado de cada ceja.
En caso de migraña, aplicar el agua fría en forma de compresa o hielo y sumergir, a la vez, pies y manos en agua caliente, lo que provoca el paso de la sangre en exceso hacia las extremidades. También alivia un turbante de vinagre de sidra.
Aceite esencial de lavanda. Para combatir la cefalea tensional, vierte dos gotas en la punta de los dedos y masajea con movimientos circulares las sienes, las órbitas oculares y tras los oídos y la nuca.
Infusiones. La de matricaria disminuye la intensidad y frecuencia de las migrañas; la de menta sirve para cefaleas con componente digestivo y la de tilo común, cuando hay ansiedad e insomnio. Se toman tres tazas al día.