(CNN) — Un científico australiano de 104 años voló a Europa este miércoles para acabar con su vida, diciendo que "lamenta mucho" vivir hasta su avanzada edad.
El botánico y ecologista David Goodall está viajando hacia la clínica Life Circle en Basilea, Suiza, acompañado de una enfermera de la organización proeutanasia Exit International, dijo el fundador del grupo.
En su cumpleaños número 104, Goodall dijo que si tuviese un deseo de cumpleaños sería morir. "No, no soy feliz. Quiero morir ...", dijo a la cadena de televisión australiana ABC.
La cuestión de si las personas deberían poder buscar ayuda legalmente para poner fin a sus vidas es un tema de feroz debate en todo el mundo.
La eutanasia sigue siendo ilegal en Australia, incluso en el estado natal de Goodall en el oeste del país, aunque el estado de Victoria planea permitir la muerte asistida desde mediados de 2019.
Siete estados de EE.UU. tienen una forma de suicidio asistido por médicos, al igual que un pequeño número de países, incluidos Japón, Bélgica y Suiza.
Philip Nitschke, fundador de Exit International, dijo que la opción de viajar a Suiza para buscar un suicidio médicamente asistido estaba abierta a cualquier persona, siempre que tuvieran una buena razón y cumpliera con ciertos criterios.
"Mi creencia es que cualquier adulto racional debería tener la capacidad de acceder a las medicinas que le darían una muerte pacífica y confiable", dijo.
Goodall recibiendo la Medalla de la Orden de Australia en 2016.
'No me queda mucho tiempo de todos modos'
Nacido en Londres en abril de 1914, meses antes del estallido de la Primera Guerra Mundial, Goodall es un respetado profesor que ha ocupado cargos académicos en el Reino Unido, Estados Unidos y Australia, según Exit International.
Después de su retiro en 1979, Goodall editó una serie de 30 volúmenes titulada Ecosystems of the World, escrita por más de 500 autores.
Goodall le dijo al ABC antes de su partida, que aunque todavía estaba técnicamente saludable, su condición física y calidad de vida se estaba deteriorando. "Es mejor que no estar (con mi salud) empeorando y empeorando, haciendo que me sienta infeliz", dijo.
Goodall ha sido miembro de Exit International durante aproximadamente 20 años y es un defensor de la muerte asistida para aquellos que deciden terminar con sus vidas.
"Si uno decide morir, entonces eso debería ser lo suficientemente justo y no creo que nadie más deba interferir", dijo Goodall al ABC.