Redacción Internacional. Los antiácidos estomacales, como el omeprazol, pueden alterar algunas bacterias intestinales y promover el desarrollo de lesiones en el hígado que pueden llegar a derivar en una enfermedad hepática crónica, conclusión a la que ha lllegado un grupo de investigaciones, de la Universidad de San Diego, California, Estados Unidos.
El uso de omeprazol aumenta el crecimiento de la bacteria Enterococcus, que inflama el hígado, por lo que no es recomendado.
Los medicamentos que quitan la acidez gástrica son usados por el 10% de la población, sin tener en cuenta que colateralmente podrían causar algunos daños en su organismo.
Según el estudio, publicado en la revista Nature Communications, los inhibidores de la bomba de protones, fármacos más conocidos por su principio activo, el omeprazol, pueden causar enfermedades hepáticas.
En dicho estudio, se han realizado pruebas en ratones y en humanos, y los investigadores han determinado que tomar medicamentos para evitar la acidez estomacal altera la composición de la microbiota intestinal y promueve el crecimiento de la bacteria Enterococcus en el sistema digestivo, que se traslada al hígado, causando la inflamación de este órgano y un agravamiento de la enfermedad hepática crónica.
LOS RATONES TENIAN UNA ENFERMEDAD HEPATICA
Los ratones utilizados en la investigación tenían una enfermedad hepática alcohólica, hígado graso o esteatohepatitis, a los que se le bloqueó la creación de ácido gástrico mediante omeprazol o ingeniería genética.
Asimiso, se secuenciaron los genes de los microbios obtenidos en las muestras de sus heces, y con esto se pudo conocer cómo era la microbiota intestinal de cada uno de ellos.
Las personas que consumen antiácidos estomacales, como el omeprazol, tienen un 20,7% más de riesgo de tener una enfermedad hepática
Igualmente, se realizaron pruebas en 4.830 personas alcohólicas, de las cuales un 21% eran consumidores habituales de fármacos con omeprazol, un 15% lo habían sido anteriormente, y el resto nunca habían consumido este tipo de medicamentos.
Se comprobó que los que los tomaban tenían más cantidad de Enterococcus en las heces y un riesgo del 20,7% de presentar una enfermedad hepática, frente al 12,4% de aquellos que no los habían consumido
Los expertos advierten de que los casos de esta enfermedad hepática crónica están aumentando en los países occidentales, y que la cirrosis se encuentra en el puesto número doce de las causas de muerte en todo el mundo, por lo que aconsejan a los médicos a valorar correctamente los beneficios y riesgos que conlleva emplear estos medicamentos
