Ya tenemos perfectamente claro que andar en nuestros días no tiene ninguna desventaja, sino todo lo contrario; desde decirle bye a los cólicos, hasta aumentar la confianza con tu galán.
Sin embargo, es probable que el hecho del sangrado pueda llegar a dificultar maniobrar en la cama alguna de tus posiciones de acróbata por temor a terminar como Carrie en su escena final.
Así que, chécate las posiciones top para que disfrutes de este momento sin interrumpir la pasión y evitar sentirte incómoda con las volteretas que des en tu encuentro pasional.
1. El balancín
Pídele a tu chico que se siente boca arriba con rodillas dobladas mientras se apoya con las palmas de sus manos. Colócate encima de él con la misma postura de manera que sus genitales queden perfectos para la penetración. Deja que él lleve el ritmo mientras tú disfrutas del balance pasional.
2. El abrazo de Morfeo
Recuéstate boca arriba con tus piernas dobladas hacia atrás y dile a tu galán que se siente debajo de ti para poco a poco ir levantando tu cadera hasta que quede a la altura de la suya para que su zona pélvica roce con tu clítoris. Él debe abrazarte por la cintura para llevar el ritmo de la penetración. ¿Tu trabajo? Dejarte llevar por el placer.
3. Sentadilla al aire
Déjate caer sobre tu cama y eleva tus rodillas dobladas; como si estuvieras haciendo un squat. Pídele a tu galán que se coloque frente a ti con sus piernas dobladas en el piso y te tome de los muslos para empujarte hacia adelante al momento de la penetración. ¡Enjoy the momento!
4. El acurrucamiento
Dile a él que se siente a la orilla de la cama. Tú deberás sentarte sobre él de manera que queden parejas sus caderas para comenzar la penetración. Asegúrate de abrazar fuertemente con tus piernas su cintura para evitar que caigas de pompas al precipicio, también pídele que te abrace con sus brazos para marcar el ritmo de la penetración.
Si quieres elevar un poco la intensidad, recuéstate boca arriba con las piernas totalmente levantadas en 90°. Dile a tu galán que coloque de rodillas frente a ti, apoyando uno de sus brazos en el suelo mientras que con el otro toma una de tus piernas para presionar tus piernas y sientas una mayor fricción a la hora de la acción.
Fuente: Actitud Femenina
