Pocas cosas no deben poner de peor humor que ver manchas oscuras de humedad en los techos o en las paredes de nuestra casa. Tener las paredes en condiciones y los techos relucientes y recién pintados requiere de un esfuerzo enorme, de modo que cuando los vemos sucios debido a la humedad esto logra deprimirnos.
Pero además de la cuestión estética tenemos que tomar en consideración que la humedad en los ambientes puede provocar problemas en las vías respiratorias, generar enfermedades y ni hablar de aquellas personas que son asmáticas o que son proclives a contraer gripe y resfríos. Un ambiente en el que se respira humedad de manera permanente no es nada saludable.
Si quieres librarte de esta humedad en los ambientes y de estas manchas curas que afean las paredes y los techos de tu casa te recomendamos que sigas leyendo para conocer que tenemos para contarte.
En primer lugar debemos identificar alguna filtración de agua o goteras que puede estar afectando las paredes o el techo generando la humedad que se encuentra a la vista. Una vez que logras identificar el origen de la humedad y solucionas este problema, puedes utilizar estos consejos para que puedas vivir en un ambiente seco y libre del moho que tanto daño hace a la salud.
¿Alguna vez notaste cómo se endurece la sal en los saleros de tu cocina? Presta atención a los días de mucha humedad para que notes este efecto, ya que la sal absorbe de manera increíble la humedad y es por eso que se la utiliza también en trucos para quitar manchas de la ropa.
Para lograr este mismo efecto en una habitación simplemente debemos colocar en un recipiente un kilo de sal y dejarlo en el centro del ambiente húmedo. Esta sal absorberá el agua que se encuentre en el aire. Cámbiala cuando ya tome un color oscuro debido a que ya no puede absorber más humedad. Se debe usar sal gruesa.
Harina de mostaza:
La harina de mostaza cumple la misma función que la sal. Coloca un poco en un recipiente en el centro de la habitación y renuévala una vez a la semana para que continúe siendo efectiva.
El vinagre blanco cumple estas funciones: elimina la humedad, limpia las manchas, elimina mohos y elimina malos olores de estos. Para aprovecharlo, llena un vaso o taza con vinagre y colócalo en una habitación durante un día completo. Te ayudará a eliminar la humedad y los malos olores. Otro uso interesante es que, en un pulverizador vierte la mitad de agua y la otra mitad de vinagre. Rocíalo sobre los muebles o paredes con humedad para hacerla desaparecer. Para que la limpieza sea efectiva déjalo actuar durante 30 minutos y limpia después con agua.
Más allá de utilizar algunos de estos trucos que acabamos de contarte, te sugerimos prestes atención a estos consejos que también podrían serte de utilidad:
- Los días secos y de mucho sol, procura abrir las ventanas para ventilar los ambientes y ayudar a secar eliminando la humedad.
- Los días de frío no te excedas con la calefacción, ya que puede producir condensación y esa humedad de quedar adherida a techos y paredes. Procura mantener la siempre entre los 18 y los 20°
- Permite que haya un espacio entre los muebles y las paredes y que nunca queden pegados. Los días de humedad algunos muebles pueden absorberla para luego pasarla a las paredes. Deja siempre un espacio entre uno y otro para que circule el aire.
- Cuando tenemos varios días seguidos de lluvia o humedad solemos improvisar un tender de ropa dentro de la casa para poder secarla. Esto genera una humedad que se va adhiriendo a paredes, techos y muebles.