Sabemos que la medicina avanzó de manera increíble los últimos 50 o 60 años erradicando enfermedades, descubriendo el origen de muchas más y el tratamiento de otras tantas, pero si algo aún no se ha podido evitar es la simple gripe o los resfríos comunes.
En algún momento del año o de nuestras vidas nos alcanzó un resfrío o una gripe que no nos dejó dormir y por los que debimos suspender todo tipo de actividad.
Ya sea por los bruscos cambios climáticos, una alimentación deficiente o convivir en aires viciados de gérmenes y bacterias; no podemos evitar contraer un resfrío que viene acompañado de tos, mucosidad, flemas, dolores de cabeza y congestión nasal. Ya sabemos que por lo general no reviste gravedad alguna pero no por eso deja de ser incómodo y nos recluye a permanecer en cama durante varios días.
Cuando estamos atravesando este momento inmediatamente pensamos en ese medicamento que se muestra como casi milagroso en televisión o algo que siempre nos recomienda algún conocido, cuando en realidad debemos recurrir a lo natural para aliviar los síntomas de los resfríos y en especial poder eliminar las flemas.
Este foco infeccioso que es el que se deposita en los pulmones y genera todo un circuito de malestares es el que debemos expulsar, y hoy te vamos enseñar a preparar un remedio natural para que puedas hacerlo.
Ingredientes:
- 1 ½ de agua
- 2 cucharadas de hojas de gordolobo
- 2 cucharaditas de miel
- 1 cucharadita de menta seca
Preparación:
En un recipiente hierve el agua y luego del primer hervor retira del fuego. Agrégale las hojas de gordolobo junto con la menta y procura que queden cubiertas por el agua en su totalidad.
Deja reposar durante 15 minutos para que desprendan todas sus propiedades y luego cuela en una taza. Agrégale la miel y bebe esta maravillosa infusión que te ayudará a expulsar la flema y aliviar los síntomas del resfrío.