Las habilidades sociales son un conjunto de conductas emitidas por las personas para expresar sus sentimientos, actitudes, deseos, opiniones o derechos a otras personas, de manera adecuada a la situación y respetando esas mismas conductas en los demás
El objetivo es que la persona tenga la capacidad de comunicarse adecuadamente y la capacidad de prever y de manejar los problemas que surgen en diversas situaciones y que estos disminuyan en el futuro, explicó a Pitoquito la psicóloga Catina Furlan.
Detalló la psicóloga que “estas habilidades no son innatas, se obtienen a través de un proceso de aprendizaje donde la familia juega un rol fundamental, es reforzado en la escuela y con el grupo de amigos. Los niños que no han aprendido estas habilidades se les dificulta establecer relaciones interpersonales y mantenerlas, generando en ellos gran ansiedad y sentimientos negativos sobre su propio valor como personas afectando su autoestima”.
Expresó Furlan que las principales habilidades sociales son autoestima, comunicación asertiva, presión de grupo, empatía, manejo de emociones, control de impulsos, trabajo en equipo y proyecto de vida también es importante.
1. Cuida la autoestima de los pequeños. Ayúdales a formar una imagen positiva de sí mismos.
Tendrán la fuerza para desenvolverse socialmente y no culparse de aquellas situaciones que no son positivas para ellos. Para ello critica la acción y no a la persona; proponles metas pero que sean adecuadas; utiliza los elogios pero que sean realistas.
2. Transmite valores a los niños y niñas. Deben aprender a valorarse a sí mismos y a los demás. Enséñales a respetar, tolerar y escuchar.
3. Sirve de ejemplo. En tus relaciones con ellos y con los demás, actúa de forma coherente y transmitiendo lo que quieres que hagan ellos.
4 Habla y trabaja las creencias e ideas que tienen. Ante determinadas situaciones sociales que te ocurran a ti y/o a ellos explícales la situación, ayúdales a entender.
5 Fomenta la capacidad de escuchar y entender a los demás. Para ello escúchales tú a ellos y enséñales a escuchar a los demás.
6 Emplea los refuerzos. Refuerza socialmente aquellas conductas adecuadas, como escuchar al otro o responder con educación, en esos casos interactuamos socialmente con los pequeños y refuerza negativamente las conductas inadecuadas, los gritos, la falta de escucha, etc. no interactúes con ellos en estos casos.
7 Procura dotarlo de un ambiente rico en relaciones. Es importante que los pequeños tengan diferentes experiencias sociales, para que experimenten, aprendan y pierdan el miedo a determinadas situaciones.
8 Anímalo a participar en grupos o hacer actividades con otras personas, sin que sea necesaria tu presencia. Es importante que los niños y niñas aprendan a desenvolverse solos, sin la protección de las figuras de los adultos.
9 Cuando los pequeños pasen por alguna situación social de rechazo o negativa de alguna manera, debes dejar que pasen por ellas, pero explícales la situación.
Fuente: Panorama
