Era tu mejor amiga, durante años siempre tuvo una sonrisa para ti; entonces, ¿por qué te traicionar?
Aunque, cueste admitirlo tras una sonrisa se puede esconder muchas emociones y rasgos de la personalidad, que no tiene nada que ver con la sinceridad ni diversión.
¡Aquí lo importante de escuchar y observar! Para empezar puedes reflexionar sobre lo que al otro le da risa. De acuerdo a Harvery p. Mindess, ante la American Psychological Association, señala que las personas que ríen abiertamente ante un chiste “sin sentido”, poseen seguridad en sí mismos y alta autoestima.
Dime cómo ríes y te diré quién eres…
Por otro lado, este acto de socialización puede revelar:
1. Risa reprimida
Esta se caracteriza por un sonido forzado, y habla de que la persona vivió o vive en un entorno donde el silencio o mantener el control es esencial. Suelen ser de carácter alegre pero de temperamento fuerte.
Inhalan cada vez que tratan de reprimir este gesto. Es un gesto frecuente en personas tímidas o modestas.
3. Carcajadas (no llegan a la exageración)
Suele ser espontánea y refleja a una persona segura de sí misma y que tiene la capacidad de reír de sí mismo y de sus creencias, ya que las tiene muy firmes; es decir, es flexible no hipócrita.
4. Mueca sin sonido
Aunque te decepcione, no es gesto de poca sinceridad, sino de buen sentido del humor; pero, tienden a ser discretos y muy reservados con sus problemas personales.
¡Ojo! Las personas que gustan de chistes con contexto sexual o que haga referencia a un problema se salud, suelen ser impulsivos, irritables o celosos.
Recuerda, no porque rían contigo todo el tiempo o porque te muestren una sonrisa a tus comentarios o acciones, significa que es sincera contigo. ¡Aprende a valorar a las personas por sus actos, y eso se ve con los años, no en meses!
Fuente: Bienestar.Salud180