anto Domingo.- Por elegancia, altura y seguridad son utilizados los zapatos de tacón, convirtiéndose en amigos fieles de la mujer a la hora de vestir.
Este tipo de calzado está presente en la vida de algunas féminas y hasta en ciertos hombres, siendo un hecho que estos elevadores del talón tienen un sólo efecto, aparentar ser más alto.
El tacón que forma parte del calzado es un elemento rígido, se encuentra unido a la parte posterior de la suela utilizando diversas técnicas de fabricación.
Su principal función es servir como soporte al talón, aunque puede considerarse como parte de la estética.
Las principales características es brindar más altura, reducir a simple vista las dimensiones del pie, alargar las piernas e incluso mostrar estatus social o económico.
Su estructura cambia de forma y tamaño, de acuerdo a los diversos tipos de calzado en el que es empleado, por lo que puede medir desde unos pocos milímetros hasta varios centímetros de altura o del área de contacto con la superficie.
El origen del tacón
El origen de los tacones tiene varios aspectos interesantes, siendo el primero el que tiene que ver con Enrique II de Francia y Catalina de Medici. Cuando ambos se casaron llegando la novia a la iglesia con un tacón bastante alto, a partir de entonces se popularizó este tipo de calzado al relacionarlo directamente con la nobleza.
En el año 1660, Madame de Pompadour se puso unos zapatos de tacón y originó el modelo o estilo Pompadour.
También en la época del renacimiento cuando un zapatero le hizo al rey Luis XIV (el Rey Sol), un zapato de tacón alto, con el cual podía disimular su baja estatura el soberano.
Esta moda donde se podía disimular la baja estatura se difundió rápidamente en las cortes europeas y fue evolucionando hasta que en el siglo XX, determinados tacones excedieron los diez centímetros lo que obligaba a quienes los usaban a realizar verdaderos malabares para no perder el equilibrio.
Hoy en día quienes usan tacones altos son casi exclusivamente mujeres, salvo en el caso de las botas para caballero que también tiene su contraparte femenina.
Algunas mujeres por el uso de los tacones presentan deformaciones en la columna vertebral, asimismo no se recomienda su uso para personas que padecen problemas renales o de ovarios ya que esto puede ser realmente perjudicial no sólo la salud física, sino que también para su salud interna.
El uso prolongado puede producir dolor de espalda.
Con esta frases de Juan Antonio López deja explicito el por qué las mujeres aman los tacones altos:
“Las mujeres los aman porque sobre ellos se sienten más bellas y femeninas, más seguras”.