Queda ciego por usar lentes de contacto cuando se duchaba; un parásito se le introdujo en el ojo derecho


Un joven inglés de 29 años, Nick Humphreys, ha quedado tuerto cuando se duchaba usando lente de contacto y un parásito se le introdujo en el ojo derecho.

Humbhrys se duchaba con las lentillas puestas, algo que hacía regularmente, al ignorar los peligros que esta práctica conlleva.

Apenas dos meses despúes de este episodio, en marzo de 2018, Humphreys perdió la visión de su ojo derecho mientras conducía y nunca la ha recuperado.

En el año y medio transcurrido desde entonces, el joven ha vivido un auténtico calvario que ha afectado a su salud mental, puesto que no ha logrado adaptarse a las limitaciones que le impone su ceguera parcial.

En estos 18 meses, el periodista ha estado a punto de perder el ojo por completo y ha sido intervenido en dos ocasiones, una para erradicar la infección. Ahora, está a la espera de un trasplante de córnea.

Una correcta higiene de las lentillas, imprescindible para evitar la queratitis

Una higiene deficiente de las lentillas, su incorrecto almacenamiento o limpiarlas con agua corriente puede provocar que el usuario desarrolle una queratitis por Acanthamoeba.

Del mismo modo, el contacto con el agua de ríos, océanos, lagos y jacuzzis también puede causar la aparición de la enfermedad, según explica la Clínica Mayo en su página web.

Para prevenir la aparición de esta infección es recomendable extremar la higiene de lentes de contacto, lavarse las manos antes de manipularlas, enjuagarlas, secarlas, frotarlas durante la limpieza, reemplazarlas según lo recomendado y no utilizarlas al nadar.

Entre los síntomas habituales se encuentran el enrojecimiento ocular, dolor, exceso de lágrimas u otras secreciones, dificultad para abrir el párpado, visión borrosa o disminuida, fotofobia y molestias.

Fuente: 20 Minutos

Te podría interesar

Deja tu comentario

Populares