GINEBRA.- Sólo la mitad de la población mundial que vive con VIH es consciente de ello, lo que impide iniciar a tiempo un tratamiento antirretroviral, que en los países de bajos ingresos llega únicamente al 34 % de las personas que lo requieren, según el Programa de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA).
A pesar de los avances en recortar los nuevos contagios de VIH -un 33 % menos entre 2001 y 2012-, en Oriente Próximo y el Norte de África se han duplicado las nuevas infecciones desde entonces, una tendencia que se aprecia también en Europa del Este y Asia Central, donde aumentaron un 13 % desde 2006.
"Aunque se han logrado progresos acelerados en grandes partes del mundo, hay signos preocupantes que indican que algunas regiones no están en disposición de alcanzar los compromisos globales para prevenir el VIH", precisó hoy en Ginebra el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, en la presentación de un informe.
Sidibé llamó la atención sobre el hecho de que gran parte de estas nuevas infecciones se producen en lugares donde hay "un acceso inadecuado" a los servicios básicos de prevención de VIH, en los que se margina a "grupos de población clave", como homosexuales, drogadictos, transexuales o prostitutas.
"Todavía el 60 % de los países tienen leyes que obstaculizan el acceso a una prevención efectiva contra en VIH o tratamientos para estos grupos de población", lamentó.
Según los datos de ONUSIDA, para los hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres es 22 veces más probable contagiarse por VIH; y éstos representan el grupo de población que más ha contribuido al aumento de nuevas infecciones en regiones como Asia.
El informe alerta del aumento de "prácticas sexuales de riesgo" en algunos países de África, como el incremento de parejas sexuales (Burkina Faso, Congo, Etiopía, Sudáfrica o Tanzania) o el descenso del uso de preservativo (Coste de Marfil, Níger, Senegal o Uganda).
La violencia de género es otro de los factores con una incidencia sobre los contagios de VIH, ya que, según dos estudios realizados en Uganda y Sudáfrica, las mujeres que había sufrido violencia sexual por parte de sus parejas presentaban un 50 % más de probabilidades de resultar infectadas; un riesgo aún más alto en el caso de mujeres drogadictas, prostitutas o transexuales.
"Cada hora, cincuenta mujeres jóvenes resultan infectadas por VIH en el mundo", aseguró Sidibé. En el caso de la gente que se inyecta drogas, éstos suponen entre en torno al 10% del total de personas que viven con VIH, porcentajes que varían mucho de una región a otra, al pasar del 5 % en Europa del Este, al 28 % en Asia o al 40 % en algunos países.
En relación a los niños, el informe señala que en los países más afectados por la pandemia de sida sólo tres de cada diez menores de quince años recibe tratamiento antirretroviral, aunque se han logrado avances para recortar la transmisión de VIH de madre a hijo.
En 2012, 647.000 menores de quince años recibían tratamiento antirretroviral, aunque la cobertura de estos tratamientos entre los niños infectados (34%) es aún la mitad que entre adultos (64%).
A pesar de los progresos en el diseño de tratamientos específicos y efectivos para niños con VIH, desde ONUSIDA afirmaron que el reto es todavía el diagnóstico prematuro de los casos de contagios entre menores de quince años.
A nivel global, el informe destaca notables avances en la lucha contra el sida, ya que el número de nuevos contagios en 2012 fue de 2,3 millones, la cifra más baja desde mediados de los noventa; aunque todavía 35,3 millones de personas viven con VIH en todo el mundo.