En esta vida, hay para todos los gustos: ¡esas clases que te dejan deshecha no representan tu única alternativa! De hecho, puedes optar por una actividad mucho más amigable con tu organismo: caminar.
Así es como puede ayudarte a adelgazar...
#1 Previene los antojos
Caminar, al igual que cualquier otro ejercicio físico, te mantiene activa y regula tus niveles de azúcar en sangre. Estos efectos convierten a esta actividad en una manera natural de luchar contra esos antojos que ponen en riesgo tu dieta, sobre todo aquellos relacionados con la ingesta de azúcares y carbohidratos.
#2 Te ayuda a dormir mejor
El descanso es fundamental para mantenerse en forma. Si no descansas bien, es probable que tu cuerpo necesite más energía de la que realmente requiere y eso te hará comer más y peor.
Caminar ayuda a regular el sueño y, por lo tanto, de forma indirecta, a perder peso.
#3 Te pone de buen humor
Está claro que cuando estás bien contigo misma tienes más ganas de cuidarte y de mejorar tus hábitos alimenticios. Por el contrario, cuando estás mal, puede que el refugio ideal sea la comida. ¡Caminar también te ayuda en este sentido!
#4 Reduce el hambre por estrés
Los ritmos de vida que llevamos están claramente asociados al estrés. De hecho, es habitual que este tenga que ser tratado por especialistas.
Ahora bien: caminar te ayuda a reducir el estrés de forma natural. De este modo, podrás evitar el hambre emocional y, ¡esto no es nada menor!
Como ves, caminar es un buen ejercicio que puedes practicar en muchas situaciones cotidianas y que está asociado a enormes beneficios que complementan la pérdida de peso.
¿Qué dices: te animas a dar más paseos?
Fuente: Imujer