PUERTO RICO.- Increible pero cierto. Esto es lo que se llama verdaderamente amar a tu prójimo. La joven ciclista Adrielyz Rivera García falleció en un trágico accidente de tránsito, pero sus órganos y tejidos vitales salvaron la vida de cinco personas.
Aparte de que aportaron a elevar la calidad de vida de otras, según informó el portal LifeLink, una asociación que coordina los trasplantes de órganos y tejidos mediante un comunicado de prensa.
Los pulmones, riñones, páncreas e hígado de la joven ciclista seguían vivos en los cuerpos de otras personas.
Igualmente otras personas más se beneficiaron de sus tejidos.
La organización Lifelink agradeció a la familia de Adrielyz por la generosidad de los aportes y la autorización de dar a conocer al público sobre los órganos trasplantados de la joven ciclista.
“El equipo de LifeLink de Puerto Rico se siente muy conmovido por este acto heroico y de tanta generosidad. Es muy loable que esta familia en un momento tan doloroso haya decidido donar los órganos de Adrielyz y ayudar a otros en necesidad”, reza el comunicado de LifeLink.
Adrielyz fue una campeona nacional de ciclismo de montaña y la más alta representación de Puerto Rico en ese deporte a nivel internacional.
Murió mientras pedaleaba el pasado viernes en el pueblo de Florida padeciendo graves lesiones en el cerebro. La declararon con muerte cerebral, y su familia autorizó la donación de órganos.
Un gran ejemplo de amor hacia los demás lo que hizo la familia de la joven ciclista puertorriqueña.