El cáncer son al menos 200 enfermedades distintas y la mitad de ellos se pueden prevenir, según la nobel de medicina Elizabeth H. Blackburn, para quien es necesario un gran esfuerzo que consiga que la población sea consciente de ello.
"El mayor golpe de efecto" que probablemente se ha hecho es conocer que la mitad de los cánceres se pueden prevenir, señaló a Efe Blackburn, quien recordó que hoy se sabe que hábitos como no fumar, el ejercicio moderado y una dieta saludable son claves.
Para esta investigadora, "el gran cambio" vendría cuando la gente fuera consciente de esto.
En relación al informe de la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer, dependiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), sobre que la carne procesada es cancerígena y la carne roja "probablemente" también lo es, esta investigadora dijo no conocer su contenido.
No obstante, indicó que ella aprendió que este tipo de estudios fijan el problema en la cantidad de carne que se consume, de ahí la importancia de cambiar algunos hábitos alimenticios.
Blackburn fue galardonada con el Premio Nobel de Medicina en 2009, junto a otros dos investigadores (Carol W. Greider y Jack W. Szostak), por sus investigaciones en telómeros y la telomerasa.
Los telómeros son las estructuras que protegen los extremos de los cromosomas y la telomerasa es una enzima; sus implicaciones afectan tanto al proceso del envejecimiento como el del cáncer.
Ese fue el tema del que habló durante su estancia en Madrid en una jornada organizada por la Fundación Fernández-Cruz.
Bajo el lema "Moviendo las fronteras para permanecer saludables y ¿alcanzar la inmortalidad?", la fundación ha reunido a especialistas nacionales e internacionales para analizar las claves del envejecimiento.
En cuanto a la investigación de los telómeros, Blackburn dijo que se están haciendo importantes esfuerzos con modelos animales, pero ha advertido de que no siempre son trasladables a humanos.
No obstante, declaró que la investigación en ratones está permitiendo conocer mejor el cáncer y el envejecimiento.
Sobre si se trasladan en demasiadas ocasiones falsas espectativas a los ciudadanos, recalcó que los medios de comunicación tienen un importante papel y responsabilidad.
"Hay muy buenas historias en ciencia y es un error convertirlas en sensacionalismo", opinó.
Preguntada por la brecha de género en ciencia y el escaso número de mujeres premiadas con un nobel, Blackburn subrayó que las cosas están cambiando, pero no todo lo rápido que deberían.
Blackburn indicó que tiene 67 años y que su objetivo, si bien sigue "enganchada a la ciencia", es ir dejando poco a poco paso a los más jóvenes: "Tengo mucha esperanza".