El mundo de la medicina ha salvado la vida de millones de personas, en innumerables ocasiones, durante miles de años. De este modo, nos hemos maravillado al conocer lo que es capaz de hacer la medicina y el papel tan importante que ésta cumple.
Sin ser la excepción, hoy voy a enseñarte algunas de las enfermedades más raras que actualmente se conocen desde dicho campo.
Desorden de identidad de la integridad corporal
La enfermedad conocida como el desorden de identidad de la integridad corporal es un trastorno psiquiátrico muy particular. Quienes la sufren, a simple vista, son personas saludables que no parecen presentar una enfermedad... sin embargo, todo ocurre a otro nivel.
Los pacientes que sufren del desorden sienten la necesidad de remover una o más extremidades de su cuerpo u otras partes que en realidad están completamente sanas y de las cuales no existe razón por la cual deben ser amputadas del cuerpo.
Existe también un gran porcentaje de personas que además del deseo de amputar una parte de su cuerpo sin ninguna necesidad física, buscan también la paraplejia y se cree que el fin de tal acontecimiento es la búsqueda por la discapacidad.
A pesar de las hipótesis, las causas exactas de este desorden son desconocidas, pero los pacientes con la idea de ser amputados (algo que sin necesidad ningún doctor sería capaz de hacer) son capaces de realizar todo tipo de cosas, desde golpear su pierna, infringir heridas a sus brazos o hasta congelar una extremidad para lograr así que luego deban ser amputadas. Increíblemente en la gran mayoría de los casos luego de la amputación el paciente deja de presentar problemas psicológicos y parece simplemente recuperado, ya no presenta episodios de depresión y se siente feliz, volviendo a tener una vida “normal”.
Insensibilidad congénita al dolor
Si hay algo que todos conocemos muy bien es el dolor. ¿Alguna vez imaginaste no sentir dolor? ¿Alguna vez lo deseaste? Pues aquí lo tienes y no es tan divertido como lo habías imaginado.
La insensibilidad congénita al dolor es una extraña condición médica, de la cual poco se sabe en sí, y que fue descubierta hace relativamente muy poco. Se trata de una condición de tipo congénita en la que la persona nace con la incapacidad de sentir dolor, la persona es completamente normal, pero no puede sentir dolor.
Puede sonar bien pero el dolor es lo que nos advierte del peligro y lo que nos mantiene seguros y alejados de problemas en nuestra salud. Si el cuerpo siente un calor excesivo, va a reaccionar para no quemarse; si se esta cortando y la piel se abre, va a reaccionar para evitar el daño; y si el cuerpo siente un dolor extraño en algún órgano o alguna parte del cuerpo, sabrá que algo no anda bien o que hay una enfermedad, pero ¿si nada nos advierte de ello?
La condición se debe a una extraña mutación a nivel genético en cuanto a la síntesis de un tipo de canal de sodio particular, el cual se encuentra en el sistema nervioso y en las neuronas.
Este se encarga de transmitir, enviar y recibir el dolor en el sistema nervioso central. Los pacientes sienten con normalidad el tacto, la presión, los cosquilleos, el calor y el frío, ¡pero no el dolor!
En la gran mayoría de los pocos casos que se han registrado de esta mutación, los pacientes fallecen con pocos años de vida por infecciones, ulceraciones y otras condiciones que se detectan demasiado tarde o incluso hasta por daños auto-infligidos. Es que no hay dolor, no hay peligro, no hay precaución.
La Pica
Las personas que sufren de la condición médica conocida como Pica sienten un extraño deseo por comer objetos y sustancias que no son alimentos, que son peligrosos para el organismo y que aportan bajísimos niveles nutritivos al cuerpo. Comúnmente, se trata de objetos como clavos, metal, vidrio, madera, papel, piedras, etc.
El extraño desorden se cree que se presenta a nivel físico como producto de bajos niveles de minerales en el cuerpo, mientras que a nivel psicológico, se presenta tras la exposición a largos períodos de estrés.
Existen distintos tipos de Pica, en algunos casos ocurre con un fin cultural, siendo una suerte de ritual que a todos nos parece un tabú. Aún así, es una enfermedad, un trastorno físico y psicológico que muchas veces tiene consecuencias mortales.
La intervención quirúrgica es un factor común en estos casos debido a obstrucciones intestinales y problemas estomacales.
El trastorno de Morgellon
Esta es una de las enfermedades más extrañas que se han conocido recientemente y se presenta como un trastorno a nivel psicológico que en el paciente provoca un malestar físico. El paciente siente la presencia de parásitos, insectos y otros organismos viviendo, moviéndose, alimentándose y desarrollándose bajo su piel.
El término fue acuñado hace aproximadamente 10 años. Se conoce muy poco de esta condición, pero se sabe que el problema es psicológico y que la presencia de los seres que el paciente describe poseer, no es real.
El paciente declara sentirlos caminar bajo su piel y alimentarse de su cuerpo a modo de parásito, pero los distintos análisis indican que el paciente está completamente sano y que no hay tal existencia.
Como resultado, los pacientes se rascan todo el tiempo provocándose heridas en el cuerpo, sufren de insomnio y paranoia. Tras esto, varios trastornos más a distintos niveles.
Esta nueva enfermedad se sigue estudiando para conocer todo lo que sea posible y descubrir qué es lo que alimenta esta paranoia y estas sensaciones en los pacientes del trastorno de Morgellon.
La ilusión de Cotard
La ilusión de Cotard es una extraña condición que ocurre en pacientes absolutamente saludables, con un cuerpo sano, que no presentan ninguna anomalía y ningún trastorno psicológico, pero que de forma muy sorpresiva, un día despierta creyendo que ha muerto.
En varias ocasiones, la ilusión de Cotard es conocida como el síndrome del muerto caminante y aunque, por supuesto, no hay ningún síntoma físico que indique que la persona esté muerta o que pueda hacerle creer que tiene una enfermedad, una parte de su cerebro hace que la persona crea estar muerta.
Lo que ocurre es que de manera extremadamente extraña, en esta condición neuro-psiquiátrica, la región del cerebro involucrada al reconocimiento facial y de la imagen propia se desconecta de la región involucrada a las emociones y los sentidos.
Esto provoca que la persona pierda la relación consigo misma y el sentido del “yo” como persona.
Esta disonancia cognitiva se traduce prácticamente en la pérdida de la existencia, el individuo cree que no existe, que ha muerto, que se encuentra en putrefacción y que ha perdido mucha sangre o algunos órganos.
Se trata de un caso de delirio extremo y es una enfermedad muy difícil de explicar.