Probablemente sientes curiosidades de con cuántas personas ha estado tu pareja en el pasado. ¿Crees que es bueno saber esa clase de informacipón? Cuando compartes un secreto ya no puedes echar marcha atrás, hay datos que es mejor no compartir.
Lisa Mattson tiene hoy 41 años, es soltera y desde que tenía 20 años ha salido con muchísimos hombres.
Pero, como cuenta en su nuevo libro, The Exes in my iPod: A Playlist of the Men Who Rocked Me to Wine Country (CreateSpace Independent Publishing Platform) , siempre que da comienzo una nueva relación le asalta el mismo miedo: no quiere revelar con cuánta gente se ha acostado a lo largo de su vida.
“He acumulado una cantidad considerable de exparejas y pienso que esto me llena de cicatrices para ser considerada una esposa digna”, explica Mattson.
La escritora trata siempre de evitar dar esta información, pero a veces, asegura, es inevitable compartir este dato. ¿Tan importante es?
No cabe duda de que, como apunta Elizabeth Bernstein en The Wall Street Journal, el número de personas con las que nos hemos acostado a lo largo de nuestra vida es uno de los detalles más personales que todos guardamos, pero ¿por qué razón deberíamos compartir la cifra con nuestras futuras parejas?
Todos los piscólogos insisten en que la base de toda relación saludable es la comunicación y la honestidad pero ¿tiene que llegar a tanto? Lo cierto es que, como revela una reciente encuesta entre solteros norteamericanos –elaborada por Match.com–, en torno al 21% de las personas nunca desvelan este dato, por lo que hay muchas más que sí lo hacen.
Quizás lo mejor es no andar cotilleando de esta manera sobre el pasado de nuestras parejas
La importancia que le damos a esta cifra varía enormemente, claro está, de lo abultado de ésta. Un número muy elevado provoca todo tipo de dudas –¿tan poco le duran?– pero casi es peor que la cifra sea ridícula:
–¿Y tú cuánto haces el amor? –Nada, lo normal. –¿Y cuánto es lo normal? –Nada, lo normal.
En realidad, hay encuestas que desvelan cuánto es “lo normal” o, al menos, la media. Pero, como en todo lo que respecta al sexo, no podemos fiarnos demasiado de su veracidad.
Sean Horan, profesor de comunicación de la Universidad Estatal de Texas, entrevistó a 183 personas, con una media de 22 años, y averiguó que la media de encuentro sexuales a esa edad era de 8.
Pero otros estudios con muestras mayores rebajan la cifra. Es el caso de los que elaboraron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EEUU, que aseguran que la media de encuentros sexuales de las personas entre 25 y 44 años es de 6,1 para los hombres y 3,6 para las mujeres.
Lo importante no es la cantidad, sino la calidad
Quizás haya personas para las que sea muy importante saber con cuántas personas se ha acostado su nueva pareja antes de hacerlo con ella, pero es un dato que no revela absolutamente nada.
Como explica Rachel Kramer en Salon, “un número no te va a decir gran cosa. Quizás un número alto (‘alto’, entre comillas, porque siempre es subjetivo), significa que ha tenido un montón de sexo casual con diferentes parejas, pero también puede significar que ha frecuentando fiestas sexuales en las que se enrollaba con mucha gente en un corto periodo de tiempo.
Quizás fue soltero una década, saliendo de vez en cuando, o sólo lo fue durante un mes muy ajetreado”.
El número, además, no tiene en cuenta el componente emocional del sexo. Quizás te interese más saber con cuánta gente está deseando acostarse tu nueva pareja –la típica amiga a la que siempre ha querido echar el guante– que conocer el número exacto de ex que ha tenido con las que quizás no ha vuelto a hablarse.
Dicho esto, quizás lo mejor es no andar cotilleando de esta manera sobre el pasado de nuestras parejas, ni dejar que lo hagan contigo. Cuando compartes un secreto ya no puedes echar marcha atrás, y hay cierta información que no hay porque compartir.
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Fuente: El confidencial
