Un estudio ha investigado que aquellas personas que son curiosas son más propensas a ser alegres, ya que están menos atentos a los aspectos negativos que tiene la vida, a diferencia de los depresivos.
Esta manera de ser los lleva a ser –por naturaleza– personas alegres, pero esto solo se le adjudica a aquellas personas que tienen como fortaleza en su carácter la curiosidad.
Es posible que las personas tiendan a deprimirse cuando no implementan sus fortalezas de carácter curioso, creativo o de líder, ya que esta situación los lleva a reprimirse emocionalmente.
Las personas que suelen estar deprimidas por largos periodos de tiempo están en un proceso de curación, durante este debes procurar que ellas sientan curiosidad por esto y no solo intenten sanarse porque sí.
Es un proceso delicado y meticuloso, el cual puede estar lleno de preguntas y curiosidades en el camino, las cuales sería interesante y beneficioso que se analicen para encontrar una respuesta a dicho problema.
Lo negativo suele surgir, y no es un proceso fácil de manejar, ya que la depresión no suele tener respuestas fáciles normalmente. Lo ideal es que, sea cual sea el pensamiento o el problema que surja, la persona no pase por este proceso sola: debe compartir lo que siente, buscar ayuda e intentar distintas estrategias para encontrarle la solución a este problema, cerrarse no arreglará nada.
Siempre hay otros lados en la vida a los cuales uno puede dedicarse a observar, enfocarse en lo negativo no suele traer resultados positivos.
Intentar convertirse en un individuo curioso, al parecer, es una muy buena solución alternativa para este inconveniente y una propuesta que promete bastante.
Por estas razones es que la curiosidad ayuda a curar la depresión, si bien no es una solución total, es muy efectiva como propuesta ¿Tú qué opinas? ¿Te consideras una persona curiosa?