Un estudio asegura que la vista tiende a contaminarse hasta un 30% más cuando se aplica el delineador sobre las líneas inferiores y superiores de cada ojo.
Sabemos que es mejor no aplicar el delineador de ojos arriba de un auto en movimiento no sólo para tener control sobre el trazo, sino también para evitar terminar en la guardia del hospital Santa Lucía.
Lo que quizás no conocíamos hasta ahora es que conviene evitar usarlo demasiado cerca del ojo, concretamente, por adentro, en lo que llamamos la línea de agua inferior y posterior.
La advertencia surge de los resultados de una pequeña investigación realizada por la Universidad de Waterloo -Canadá- y la Universidad de Cardiff -Gran Bretaña- que asegura que las partículas de producto que quedan en el ojo podrían contaminarlo cuanto más cerca se encuentran de la superficie de la córnea.
De acuerdo con el estudio, se comprobó una mayor existencia de partículas en el interior del ojo cuando el delineador se aplica sobre el lagrimal. Los resultados de la investigación aseguran que se encontró un 30% más de contaminación ocular en estos casos.
De ahí, entonces, que los investigadores hayan llegado a la conclusión de aconsejar, al margen de cuestiones estéticas, que el delineado se realice sobre la parte externa de las pestañas y no sobre su nacimiento.
De la misma manera, se advirtió que este tipo de maquillaje junto con el rimmel tienen una fecha de vencimiento de hasta cuatro meses después de abiertos y que un producto viejo tiende a contaminarse con bacterias que crecen en el interior de sus envases.