Las tan famosas y usadas toallitas desmaquillantes no son el mejor complemento para limpiar la piel, solo son productos de higiene y no de tratamiento, que solo deben utilizarse de forma ocasional; pues en la mayoría de los casos la limpieza que realizan es únicamente superficial.
Hay pieles como las sensibles, rosáceas, atópicas y con mucho acné, que son especialmente intolerables y perjudiciales al uso de las toallitas desmaquillantes.
En ningún caso deben utilizarse diariamente, solo si es necesario en un momento puntual, pues estos productos esconden una serie de desventajas para el rostro que debes conocer.
Pueden propagar hongos
Hay que tener especial cuidado cuando compramos toallitas desmaquillantes con el tipo de conservantes que llevan, pues estos son los encargados de evitar la propagación de hongos y bacterias dentro del propio envoltorio. Si los productos para su conservación no son los más apropiados, estos también se transmitirán al rostro y podrá ocasionar serios problemas, alterando el estado natural de la piel pudiendo provocar la aparición de ronchas o ampollas.
Debilitan las pestañas
Las toallitas son totalmente desaconsejables para limpiar el rímel que aplicamos a nuestras pestañas. Estos productos no tienen los componentes necesarios para que las pestañas queden completamente limpias, lo que hace que las pestañas se sequen, y puedan quebrarse y al final acaben cayéndose. Por ello, hay que utilizar productos potentes que dejen las pestañas libres de cualquier impureza.
Irritaciones en la piel
En todo momento debemos ser conscientes de que al usar estos productos algunos pueden contener perfumes o fragancias, y si no somos cuidadosos en este aspecto, la piel puede verse sensiblemente afectada provocando graves irritaciones e incluso alergias. Además, es necesario saber que estas toallitas pueden contener alcohol, aunque las hay que prescinden de este componente, gran parte de ellas lo llevan pudiendo provocar una irritación de la piel si las utilizamos habitualmente.
Ensucian más el rostro
Estas toallitas desmaquillantes realmente no retiran por completo el maquillaje y la suciedad que tenemos en la cara, solo lo hacen de forma superficial, lo que provoca que el maquillaje se reparta por todo el rostro, provocando finalmente que la cara se ensucie más. Para ello, lo aconsejable es que si hemos utilizado las toallitas, posteriormente enjuaguemos con agua la cara y apliquemos una crema hidratante.
No limpia los poros
Con las toallitas desmaquillantes lo que hacemos es remover todo el maquillaje por la cara, pero no permite que los poros queden limpios, pues estos no están abiertos y la suciedad que tenemos dentro de ellos queda ahí. Para ello, habría que utilizar una buena crema limpiadora que consiga abrir los poros y que los restos salgan para que la cara quede totalmente limpia y libre de impurezas.
Arrugas prematuras
Con el empleo de las toallitas desmaquillantes, debido principalmente a lo que comentábamos anteriormente de que no consigue abrir los poros, a largo plazo lo que provoca es que las arrugas comiencen a aparecer antes de lo previsto. Pues al no realizar una limpieza eficaz y total, la suciedad se sigue quedando en la cara impidiendo que la piel pueda respirar. Así como pueden provocar sequedad y acné.
Perjudiciales para los ojos
Los ojos y los labios son dos zonas de la cara especialmente sensibles a la hora de limpiarlas, por ello, el uso de toallitas por estas zonas es desaconsejable. Lo que hacemos cuando empleamos estos productos es que arrastramos la piel del contorno de los ojos, que no olvidemos se trata de una piel delicada y fina, que con tanto restregamiento al intentar quitar el maquillaje, al final acaba dañando esta zona. Lo mismo que ocurre con los labios, una parte del rostro también muy sensible al uso de estas toallitas.
Contribuyen a la aparición de erupciones
Es muy importante saber elegir las toallitas si decidimos utilizarlas, por ello, hay que elegir aquellas que no tengan formaldehído o metilisotiazolinona, estos componentes lo que hacen es favorecer la formación de ampollas, erupciones e incluso hinchazón. Por tanto, está en tus manos utilizarlas o no, como hemos dicho, se trata de algo que puede aparecer si su uso es diario.
Muchas de las toallitas que se emplean lo único que hacen es resecar la piel y que esta quede tirante, pues como ya hemos dicho, no consiguen que el rostro quede libre de impurezas.
De hecho, muchas de estas toallitas contienen tensioactivos que lo único que hacen es irritar la piel, y en ningún momento conseguimos que la piel quede limpia, sino al contrario, que notemos que la piel está reseca.
