La amebiasis: importancia de su diagnóstico y tratamiento

La amebiasis es una enfermedad que afecta a todas las personas, con más frecuencia a los jóvenes y adultos, aunque también pueden presentarse casos graves en niños e incluso en lactantes. La amebiasis puede llegar a ocasionar la muerte por deshidratación, si no es controlada a tiempo.

La Organización Panamerica de la Salud explica que esta infección por entamoeba histolytica afecta al 10 % de la población mundial, con mayor impacto en los países tropicales.

En un estudio llevado a cabo por esta organización se estima que la infección por amebiasis genera 50 millones de casos y hasta 100.000 muertes por año.

Diagnóstico. De acuerdo con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) el diagnóstico de amebiasis debe ser realizado mediante la aplicación de pruebas capaces de detectar específicamente la afección. El reconocimiento de la amebiasis se realiza a través de exámenes de laboratorio de las heces de la persona enferma.

Tratamiento. El tratamiento depende de la gravedad de la infección. Generalmente, se recetan antibióticos.

Si el paciente presenta vómitos, puede necesitar medicamentos a través de una vena (intravenosos) hasta que pueda tomarlos por vía oral.

Por lo general, no se recetan medicamentos antidiarreicos, ya que pueden empeorar la afección.

Después del tratamiento con antibióticos, se deben examinar de nuevo las heces para constatar que la infección haya desaparecido, explica el portal de internet Medline Plus.

Forma de transmisión. La amebiasis se transmite por medio de agua, alimentos, utensilios o directamente por vía oral cuando la persona infectada no se lava las manos después de ir al baño y la introduce en su boca, ya que el ser humano es el principal reservorio del parásito, según explica el portal de internet Esmas.com

Efectos de la amebiasis. La Organización Mundial de la Salud (OMS) explica en su portal web que “la disentería amibiana se produce cuando los parásitos invaden la pared intestinal, formándose a veces abscesos en el hígado (o con menos frecuencia, en los pulmones o el cerebro) como consecuencia de la diseminación hematógena. También pueden producirse lesiones cutáneas.

Recomendaciones. Hervir el agua antes de ingerirla, lavarse las manos con frecuencia y evitar el consumo de alimentos en establecimientos que no cumplan con las normas de higiene son algunas de las recomendaciones para prevenir la amebiasis.

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