Si eres un padre primerizo, y aún si ya tienes algo de experiencia, quizás estás cometiendo algunos errores a la hora de darle de comer a tu bebé. Si no quiere hacerlo, o tarda mucho, puede parecerte frustrante la hora de alimentarlo. Pero debes evitar los errores más comunes.
Error 1: obligarlos a comer
Si crees que obligar a tu pequeño a comer algo que no le gusta es buena idea, piénsalo dos veces. Ambos terminarán enojados y exhaustos. A la larga no querrán ni saber de la hora de la comida, y menos de comer. Mejor, no hagas todo un show si decide no comer. Cuanto menos importancia le otorgues, menor será la reacción para la siguiente. Espera un poco y reinténtalo con una actitud positiva.
Error 2: convertirte en cocinera de poca variedad
Con tal de complacer a los más quisquillosos en la mesa, muchos padres reducen el menú y las opciones que cocinan y así evitar discuesiones. A veces el motivo es que los pequeños no pasen hambre, no crezcan sanamente. Pero cocinar solo lo que quieren... mala idea. Mejor planea comidas con al menos un ingrediente que le encante al peque. Atrévete a mezclar ingredientes, a inventar tus propias recetas. Quien sabe, a lo mejor terminas con "especialidades de la casa" que ni imaginabas.
Error 3 Insistir para que se terminen todo lo que hay en el plato
Por lo general los padres servimos porciones más grandes de las necesarias, o les damos algo para entretenerse (como un jugo) muy cerca de la hora de comer. Lo mejor es calcuar 1 cucharada de comida de cada platillo según la edad de tu hijo (cuando hay 2 o 3 platillos distintos). Así un bebé de 2 años recibiría 2 cucharadas de -digamos- zanhorias, 2 de arroz y 2 de pollo. También procura darles snacks al menos hora y media antes de las comidas. En lugar de enfocarte a que "limpien el plato", aliéntalos para que coman hasta saciarse.
Error 4 Ignorar las preferencias de comida
Los pequeños suelen tener más papilas gustativas que los adultos (el doble casi), por lo cual la comida salada o picante, puede ser muy fuerte para ellos. Lo mismo pasa con los sabores amargos (como espinacas o brócoli). ¿Qué tal si mejor le presentas estas opciones al pequeño para que vaya experimentando con ellas?
Error 5 Rendirse antes de tiempo
No asumas que porque tu hijo rechazó un platillo antes, lo rechazará siempre. Puede tomar hasta 20 veces de exponerlo a un mismo platillo para que lo acepte por completo. Vuélvele a preparar lo mismo, y dale la oportunidad de experimentar con ello. Esto incluye que la toque con las manos, que se la meta a la boca y luego la escupa.
Error 6 Snacks inapropiados
Los snacks que le des a tu hijo deben de ser nutritivos, y que los ayuden en su desarrollo. Las galletas o dulces solo son altos en grasas y calorías. Varía los snacks, elige mejor algo de fruta, por ejemplo.
Error 7 Usar la comida como recompensa
"Si te portas bien, te toca postre"... Es tan típico, que hasta resulta normal, pero por lo general las recompensas, como en la frase, tienen que ver con azúcares y grasas. Además de que sin quererlo estás incitando a hábitos alimenticios poco saludables. Utilizar los dulces, o alimentos azucarados, como recompensa provocan que el bebé entienda que esos alimentos son deseables, mientras las comida saludable no lo es. En lugar de ofrecerle postre por terminarse las verduras, ofrécele una salida al parque, un baño de espuma, más tiempo de juego...