Si quieres visitar con menos frecuencia al dentista, puedes cuidar tus dientes de la mejor forma posible. Para eso existen algunos alimentos y hábitos que te ayudarán a tener una sonrisa hermosa con una dentadura sana y nacarada.
Alimentos pro-dientes
Todo lo que comes se refleja en los dientes. Si bebes en exceso vino tinto y té negro, o fumas quizá no tengas los dientes tan perlados.
Por eso, sé consciente de los alimentos y bebidas que consumes. Revisa nuestra lista de alimentos que ayudan a blanquear los dientes. Ten tu cepillo a la mano y visita regularmente al dentista.
Dos minutos para cepillarte
La cantidad de tiempo que inviertes para cepillarte es esencial para el cuidado de la boca. Para remover las bacterias es necesario limpiar los dientes por espacio de dos minutos. Para ayudar a esta tarea, coloca un temporizador en el baño o pon tu canción favorita.
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La técnica correcta
Según los dentistas, la mejor manera de cepillarse es colocar el cepillo de dientes en un ángulo de 45 grados contra las encías y suavemente moverla en un movimiento circular, en lugar de un movimiento hacia atrás y hacia adelante.
Un té al día
Los flavonoides y otros ingredientes del té parecen impedir que las bacterias dañinas se peguen a los dientes, y también bloquear la producción de un tipo de azúcar que contribuye a la caries. De hecho, el té verde contiene altas cantidades de fluoruro.
Usar enjuague bucal sin alcohol
La mayoría de los enjuagues bucales tienen demasiado alcohol y pueden secar los tejidos de la boca, haciéndolos más susceptibles a las bacterias.
¡No olvide su lengua!
Limpie su lengua cada vez que se cepille y destierre la placa y así refrescar su aliento. Una de las principales causas de mal aliento es la acumulación de bacterias en la lengua.
Cepille sus dientes con bicarbonato de soda una vez por semana para eliminar las manchas y blanquear los dientes. Úselo como lo haría con la pasta de dientes. También puede usar el bicarbonato en la cocina.
Beba un vaso de agua por cada horaque está en la oficina. De esa manera, cuando llegue a casa, usted ha cumplido su dosis diaria recomendada. Este líquido mantiene el sistema digestivo saludable, controla el peso e hidrata su piel, además ayuda a mantener los dientes nacarados. Enjuagar la boca con agua salada es una idea brillante, porque sus minerales alivian los dolores bucales y previene infecciones.
Fuente: Cocina y Vino
