Si practicas estos ejercicios varios días a la semana conseguirás disfrutar experiencias mucho más gratificantes en la cama y lo que es mejor tu pareja lo agradecerá. Gracias a estos ejercicios conseguirás más fuerza, resistencia y flexibilidad, lo que te ayudará a mejorar tus relaciones.
Te mostramos movimientos y ejercicios que mejoran dos aspectos fundamentales: la resistencia y la flexibilidad además de desarrollar un núcleo (abdominales y zona media) sólido que te permite fortalecer los músculos que intervienen más directamente mientras mantienes relaciones.
Realiza 3 series de entre 15 y 20 repeticiones de cada ejercicio y descansa 30 segundos entre series.
Fondos Este ejercicio es básico para los hombres, refuerza la musculatura que ayuda a mantenerse ‘encima’ soportando durante más tiempo el peso de tu propio cuerpo sin cansarse, y por tanto permitirá disfrutar más. Si estás acostumbrado a hacer este ejercicio, prueba a añadirle algo de dificultad haciendo los fondos mientras mantienes los pies en lo alto de una silla.
Bebé Este ejercicio está más recomendado para las mujeres ya que las dota de mayor flexibilidad y elasticidad. Acostada boca arriba, con los pies en el suelo, eleva las rodillas hasta que toquen el pecho, para quedarte como en posición fetal. Agarra las piernas y mantén la posición unos 20 segundos. Repite el ejercicio unas 15 veces.
El orador Sentado de rodillas y con la espalda recta, comienza formando un angulo de 90º, después trata de balancearte hacia atrás y aguantar la posición durante un rato contrayendo y apretando el abdomen. Mantén la posición unos 5 segundos y acaba en la misma posición en la que empezaste. Repítelo varias veces, te ayudará a reforzar la zona media y tus piernas para que seas capaz de mantener ciertas posiciones durante más tiempo sin cansarte.
El paseante Como si fuéramos a hacer un ejercicio de Split, comienza de pie y da un paso hacia delante. Trata de bajar el cuerpo mientras mantenemos la espalda en posición vertical, flexionando la pierna. Empuja la pelvis hacia adelante hasta que sienta que estira el psoas. Mantenga esta posición durante 30 segundos, luego hazlo con la otra pierna.
Puente inverso Este ejercicio ayuda a fortalecer y ganar resistencia en los abdominales y los lumbares. Para ello realizamos una serie de ejercicios que simulan algunos movimientos propios de cuando se mantienen relaciones.
Tumbado boca arriba con las piernas dobladas apoya los pies en el suelo y eleva y desciende la pelvis. En la posición superior intenta aguantar manteniéndote recto como una tabla durante 5 segundos.
Es una posición de yoga que puede ayudar a mejorar y disfrutar más del sexo sobre todo a las mujeres al aumentar su fuerza y resistencia de los músculos que se utilizan para crear resistencia mientras empuja el hombre, lo que aumenta la intensidad del empuje.
Se fortalecen los abdominales, lumbares, glúteos e isquiotibiales.
Plank con rodillo Es un ejercicio muy completo ya que ayuda a fortalecer tanto el tórax como los abdominales. Es un ejercicio idóneo para el hombre al que le gusta practicar la posición del misionero.
Para ello se necesita llevar puestos calcetines y realizar el ejercicio sobre una superficie lisa preferiblemente mármol o parqué. Tumbado boca abajo en la misma posición que adoptarías para hacer fondos, comienza a subir tus caderas arrastrando las piernas como si quisieras introducirlas por entre los brazos. Mientras haces el ejercicio mantén las manos quietas y apoyadas en el suelo, desliza el cuerpo de nuevo, a continuación, deslice hacia delante hasta que tus pies hayan llegado lo más cerca posible de las manos.
Secretaria La resistencia y la fuerza son necesarias para mantener el tipo mientras mantienes relaciones, pero también es importante ser flexible y por tanto ‘trabajar’ más posturas y de un modo más placentero.
Sentado en el suelo con las piernas estiradas hacia delante, cruza una pierna por encima de la otra y trata de empujar hacia atrás con el brazo. Aguanta 10 segundos. Luego cambia de pierna.
Sentadillas Este ejercicio te ayuda a fortalecer el tren inferior, pero también ayuda a que la sangre fluya más fácilmente por las zonas más erógenas de cerca de los genitales y por tanto aumentar la líbido y las ganas de sexo.
De pie con los pies separados el ancho de los hombros, sin levantar los talones del suelo, imita el gesto de sentarse en una silla imaginaria. Cuanto más bajes, mejor. Trata de hacer un mínimo de 15 repeticiones e idealmente llegar a 25.
Fuente: El Confidencial